viernes, 23 de noviembre de 2012

Algunas soluciones a corto y largo plazo para llegar a fin de mes


El aumento del paro, la congelación de los salarios y la subida de impuestos hacen que, hoy por hoy, llegar a fin de mes sea cada vez más complicado. Según los últimos datos aportados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el 12,7% de los hogares españoles tienen muchas dificultades para afrontar la recta final del mes. Este porcentaje supera en 2,9 puntos el registrado en 2011 cuando el 9,8% de las familias españolas no podían llegar a fin de mes.
Además, y según datos del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) correspondientes al pasado mes de septiembre, el 14,17% de las familias españolas tuvo que echar mano de sus ahorros para afrontar los gastos mensuales y el 6,4% tuvo que contraer nuevas deudas para solucionar pagos.

Principales soluciones en el corto plazo

Existen circunstancias puntuales -gastos imprevistos- que suponen un descalabro para el presupuesto doméstico. Las entidades financieras han diseñado productos de activo, distintos préstamos bancarios, dirigidos precisamente a solventar esa falta de liquidez puntual.
Líneas de financiación: no se trata de préstamos personales, sino más bien, de líneas de crédito con importes reducidos y con plazos de amortización también cortos. Por ejemplo, iBanesto cuenta en el mercado con un Crédito Miniconsumo para aquellos momentos en los que hace falta un pequeño importe para hacer frente a una determinada contingencia.
El importe de este crédito va desde 600 euros hasta un máximo de 3.000 euros a devolver en un plazo de 12 meses. El tipo de interés que aplica es del 9% y la comisión de apertura es del 1,5%.
Dentro de esta gama de productos diseñados para dotar de liquidez al usuario en el corto plazo, Banco Sabadell ha puesto en el mercado su Línea Expansión, una línea de préstamo de hasta 5.000 euros ligada a la Cuenta Expansión de la entidad. Con esta línea de crédito, el cliente puede retirar la cantidad de dinero que necesite tantas veces como sea necesario. No tiene comisiones y aplica una TAE del 10,69%.
El cliente decide, además, el plazo en el que quiere devolver el dinero (3,6,9,12,18 ó 24 meses). El límite de la Línea Expansión se actualiza y se repone mensualmente en función de lo que el cliente vaya devolviendo cada mes, con lo que siempre, puede volver a utilizarlo sin pagar más. El cliente, además, puede cancelar el límite de su línea cuando quiera.
Préstamos preconcedidos: la falta puntual de liquidez también se puede subsanar con los préstamos preconcedidos. Es decir, préstamos personales preautorizados cuyas condiciones varían en función de la vinculación del cliente con la entidad. Su importe suele variar entre los 1.200 y los 30.000 euros. Normalmente, la oferta de este tipo de préstamos preconcedidos se hace a los clientes que domicilian la nómina en la entidad, aunque el banco siempre puede denegar su concesión si las condiciones de solvencia del cliente han variado en los últimos meses.
Anticipos de nómina: otra de las opciones bancarias puesta a disposición del cliente para solventar problemas puntuales de liquidez son los anticipos de nómina, es decir, una especie de créditos rápidos que suelen conceder las entidades financieras con unas condiciones favorables a sus clientes de cuentas nómina.
Con este tipo de "crédito" el banco adelanta al cliente el importe equivalente a una o más nóminas y lo hace sin intereses aunque con una comisión de apertura del 3%, que suele considerarse como una especie de interés más o menos elevado.
Tarjetas de crédito: el uso adecuado de las tarjetas de crédito también puede ser de utilidad en situaciones coyunturales de falta de liquidez. Pero deberían usarse con moderación y siendo muy conscientes de lo que se gasta porque sino pueden llevar al cliente a una situación de endeudamiento peligrosa. La mejor forma de "optimizar" su uso es: eligiendo tarjetas con bajas comisiones y reunificando todas las tarjetas en una sola, dando de baja todas las demás.
En una situación de falta de liquidez puntual se debe tener especial cuidado con los descubiertos en la cuenta ya que acarrean una de las comisiones más altas que existen. Estos descubiertos suceden cuando se retira dinero sin que haya saldo suficiente y la entidad adelanta los fondos.

Principales soluciones a la falta de liquidez a largo plazo

Más allá de los problemas puntuales de liquidez en el corto plazo hay otras soluciones para lograr algo más de efectivo en el largo plazo:
Reunificación de deudas: es una de las salidas que existen para poder hacer frente a todos los gastos mensuales. La reunificación de deudas es una operación financiera que permite que todos los gastos que hay que cubrir en un mes se conviertan en uno sólo. Es decir, se reunifican todos los préstamos en una sola cuota hipotecaria con lo que mensualmente se paga menos al tener una única cuota y con un tipo de interés menor.
El único requisito indispensable para poder llevar a cabo la reunificación de deudas es el de ser propietario de una vivienda. Además, antes de decantarse por esta opción, es recomendable valorar que se trata de una operación costosa que implica una serie de gastos: tasación, cancelación de la hipoteca y préstamos a reunificar, gastos de gestoría, notaría, y registro, comisión de apertura de la nueva hipoteca y honorarios de intermediación en caso de que se contrate a un intermediario financiero o broker que negocie la reunificación de la deuda (algo aconsejable ya que se trata también de una operación compleja).
Ampliación de la hipoteca: por lo general, el mayor gasto que afrontan las familias al mes es el pago de la hipoteca. Una de las soluciones para intentar obtener algo de liquidez es la de negociar con el banco una ampliación de la hipoteca. Su puede negociar o bien una ampliación del plazo de amortización o bien una ampliación del capital prestado.
Ampliación del plazo de amortización: el alargamiento del plazo de un préstamo hipotecario puede convertirse en una solución a eventuales dificultades económicas para el pago de las cuotas de la hipoteca. Existen, eso sí, dos circunstancias en las que esta operación no es posible: cuando el cliente tiene, además del préstamo hipotecario otras cargas y cuando el préstamo original ya tiene un plazo de amortización de 40 años o más. En principio, todas las entidades financieras se muestran partidarias a aceptar este tipo de operaciones ya que, lo que buscan es cobrar la deuda, independientemente del plazo. Además, a mayor plazo, mayor beneficio para la entidad.
Ampliación del capital prestado: más allá de ampliar el plazo de amortización para reducir las cuotas mensuales, existe otra opción cuando se habla de la ampliación de la hipoteca: incrementar el capital prestado para obtener liquidez. En muchas ocasiones, la ampliación del capital puede conllevar, además, un alargamiento del plazo de amortización, de tal forma que las cuotas a pagar sean más asequibles.
La ampliación de la hipoteca -tanto si se amplía el plazo de amortización como si lo que se amplía es el capital- es una operación que conlleva una serie de gastos elevados y que se deben analizar con detalle. Si la ampliación de la hipoteca conlleva gastos muy elevados existen otras fórmulas, algo más económicas como la subrogación hipotecaria. Con esta figura -que supone cambiar la hipoteca a otra entidad financiera- conseguirá mejorar las condiciones de su hipoteca pero no ampliar el importe prestado.
(Publicado en EL ECONOMISTA)

jueves, 22 de noviembre de 2012

En pleitos te veas

Dice la maldición gitana: en pleitos te veas y los ganes. Desde hoy y teniendo en cuenta la chauza de la falta de impresos, el acceso a la justicia deja de ser gratuita a nivel impositivo, dado que hoy se ha publicado en el BOE la Ley 10/2012 que institucionaliza el acceso a la justicia de pago para todos los ciudadanos con la imposición de las nuevas tasas judiciales.
Esta nueva ley, cambia las reglas de juego en los sistemas de financiación de la justicia y lo que antes se paga por vía impuestos y presupuestos generales, ahora, se cambia por sistema mixto, mediante la introducción de una tasa judicial por el acceso a cualquier tipo de proceso judicial que no sea penal, único régimen que realmente se queda fuera del sistema de tasas. Los importes que se cobran son realmente elevados y consagran una justicia para unos, los que tienen dinero y otra para los que no lo tienen

Cuánto cuestan con las nuevas tasas judiciales

En procesos civiles
  • Verbal y cambiario: 150 euros
  • Ordinario: 300 euros
  • Monitorios, demanda incidental en concurso: 100 euros
  • Ejecución extrajudicial y oposición a ejecución: 200 euros
  • Concurso necesario: 200 euros
  • Apelación: 800 euros
  • Casación y extraordinario por infracción procesal: 1.200 euros
En procesos contenciosos-administrativos
  • Abreviado: 200 euros
  • Ordinario: 350 euros
  • Apelación: 800 euros
  • Casación: 1.200 euros
En procesos de orden social
  • Suplicación: 500 euros
  • Casación: 750 euros
Pero el caso es que aunque estas cifras puedan parecer asumibles las tasas judiciales tienen una segunda componente que se fija en variable que es la realmente cara. En función de la cuantía del proceso, abonaremos el 0,5% hasta un millón de euros y el 0.25% para la cuantía que exceda del primer millón. Este importe variable se limita a 10.000 euros por tasa liquidada.
Para tener una idea una idea, supongamos que se plantea un juicio ordinario para reclamar una deuda de 30.000 euros. La primera tasa que tenemos que pagar es de 600 euros, cuantía nada despreciable desde luego que se suma a los costes que se incurre de abogado y procurador.

En el caso de que se haya comenzado un proceso judicial y se llegue a una solución erxtrajudicial, se tendrá derecho a la devolución del 60% de la tasa, pero sin cálculo de intereses de demora. En el caso de que en el proceso se condene en costas a la parte contraria, la tasa pagada inicialmente, se le podrá repercutir al demandado, aunque como siempre, muchos procesos de impagos, terminan con una sentencia favorable para el acreedor pero sin pago real por insolvencia. Si pagamos las tasas por medios telemáticos, tendremos un descuento del 10% en el importen total de la tasa. Por ahora, sólo se quedan como exentas de dichas tasas, los juicios monitorios y las reclamaciones de cantidad inferiores a 1.000 euros, así como los procesos de concurso voluntario, protección de los derechos fundamentales y libertades públicas y Administración Electoral.
Si el demandante tiene derecho a la asistencia jurídica gratuita, están exentos de la tasa; al gual que los poderes públicos, la administración junto con sus organismos públicos. Los trabajadores que interpongan procesos en el ámbito social, gozan de una exención del 60% en el total de la tasa.

Cara Justicia para todos

La justicia gratuita no existe; nada es gratis en esta vida y lo que antes se pagaba íntegramente al 100% vía impuestos, ahora se le suma el pago por uso. El problema de fondo que se ve en todo esto es que no siempre, los ciudadanos disponen de las cantidades necesarias para afrontar el ejercicio de sus derechos ante la justicia y si ya es complicado en muchos casos pagar un abogado y procurador, ahora se le suma el coste fiscal de ejercitar el cumplimiento de nuestros derechos. Estas tasas están configuradas para que las acciones que se pidan no se ejerciten hasta que se abonen las tasas correspondientes, por lo que el pago es requisito imprescindible nada más sentarnos en el despacho de cualquier abogado. Procesos como un divorcio, pueden ser un verdadero calvario si comienzan a sucederse diferentes acciones judiciales en varios ámbitos como liquidación de gananciales, regímenes de visitas y demás.
Me parece un desastre el decreto porque si algo no sobra en el bolsillo de los ciudadanos es dinero hoy en día y si por lo menos se tenía derecho a la Justicia, ahora vamos al dicho de los EEUU, donde se explica algo como que en América se tiene derecho aJusticia, pero ¿cuánta Justicia puede usted pagar?

martes, 20 de noviembre de 2012

Una buena medida aunque criticada sin razón

Ayer, el Gobierno ha dejado caer una nueva medida que ha creado un buen revuelo en los medios de comunicación, que creo que han entendido poco, mal o nada. La medida que ha planteado es otorgar el permiso de residencia a los extranjeros que compren una vivienda por valor de 160.000 euros en adelante.
La medida ha levantado ampollas, en primer lugar por el malentendido entre nacionalidad y residencia, terminos jirídicos distintos y que tienen una diferencia sustancial. De entrada, esta medida es excelente y es ninguna novedad dentro de los ordenamientos jurídicos de bastantes países. Además, la mezcla de conceptos es espectacular y se están propagando varios bulos, como tales falsos de solemnidad.
Un residente en España no tiene derecho a la asistencia sanitaria por el hecho de residir. Eso lo de la nueva Ley General de la Seguridad, que dan cobertura sanitaria a los residentes que tengan un trabajo por cuenta propia o ajena. Primer bulo descartado, dado que estos compradores, pueden usar estas viviendas como segundas residencias y trabajar en sus países de origen. Ahora bien, si encuentran trabajo en España, ¿qué problema hay para que tengan su cobertura sanitaria?
El permiso de residencia sin permiso de trabajo siempre ha tenido precio económico. Lo digo porque periodistas que no se han molestado en leerse siquiera la ley que critican. Hoy, todo extranjero que solicite la residencia en España la puede tener si puede acreditar medios económicos suficientes para mantenerse él y su familia.
Se ha establecido una ecuación perversa que expone que extranjero rico = extranjero mafioso que no tiene base alguna y que en Canarias vende titulares a porrillo. Que hay mafias, sí cierto, tanto españolas como extranjeras pero el titular de “España se nos llenará de mafiosos” no tiene correlación alguna con las estadísticas reales. ¿Acaso no hay mafias extranjeras en España ya? ¿No es cierto que existen bastantes inmuebles adquiridos por sociedades en Canarias que se usan y disfrutan por personas física?
Pero es que a nadie se le ha ocurrido evaluar la revitalización económica a efectos de consumo interno que puede suponer la entrada de ciudadanos con alto poder adquisitivo, su capacidad de gasto e inversión y las sinergias positivas que puede tener a todos los efectos. En este país lo mismo defendemos sanidad universal para todos que criticamos la llegada de extranjeros con los mismos argumentos.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Pasamos de los mil, gracias a todos

En poco menos de dos meses, este blog ha pasado de los mil usuarios únicos, lo que tiene dos lecturas obligadas para mi. La primera, darles las gracias a todos por aguantarme y con ello prometerles que seguiré escribiendo regularmente sobre temas que considero que son de público interés. Entiendo así todo aquello que afecta a nuestro bolsillo, aunque reconozco que son temas ásperos los que toco, como me dice un buen amigo, estas en el filo.  Pero estoy por ello más agradecido y asombrado por la paciencia y amabilidad con que han acogido mi Blog.
En segundo lugar, tanta gente siguiéndome implica una responsabilidad que asumo entre preocupado e ilusionado. No debo- ni puedo defraudar a tantos amigos, ocasionales, sí, pero que me recuerdan que las opiniones de todas las personas son valiosas, todas suman y todas las agradezco porque de esta crisis que estamos padeciendo salimos entre tod@s. Más de mil lectores hasta hoy y más de mil gracias que doy a todos y cada uno. El agradecido soy yo, un abrazo muy fuerte a los lectores o participantes presentes y futuros. Pasen y lean, seran bien recibidos. MIL GRACIAS!!!

viernes, 16 de noviembre de 2012

Huelga ¿Y ahora qué?

Hubo huelga general. Un éxito, según los organizadores; un fracaso rotundo, según el Gobierno central y sus medios afines. En cualquier caso, en Canarias hubo manifestaciones nada despreciables, muy concurridas que dejan ver que hay mucho descontento en las calles, hartazgo sin precedentes, indignación, miedo y preocupación por el futuro en dosis nunca vistas por mi hasta ahora. Es obvio que avanzar como sociedad en estas condiciones es más que difícil, por más que uno quiera tener y buscar optimismo en cada rincón, sin caer en el éxtasis de los brotes verdes, que uno ya está mayor para que me tomen el pelo.
El caso es que hubo huelga general, muy seguida --sin entrar en guerra de cifras--en el sector público y los transportes, que ya hacen que sea complicada la jornada laboral para el que quiera trabajar. Hubo cierta parálisis en la producción, no vale la pena negarlo, aunque en el sector privado, lo que va quedando de el, la normalidad fue la nota predominante, al menos en mi opinión.
Ahora bien, ¿cómo se mide el éxito de una huelga general? Desde luego me niego a hacerlo sumando los manifestantes o la actividad que no se hizo o los paros generados. Esos son sólo expresiones de la misma huelga. Concluyo que el éxito o fracaso de una acción tan determinante como una huelga general va en función del gran objetivo pretendido, que es el cambio en la política económica del Gobierno. ¿Eso se ha conseguido o al menos se ha avanzado en esa dirección? Yo lo dudo mucho, por el contrario, estoy por afirmar que en este sentido el fracaso ha sido estrepitoso. Y ello por la simple razón de que el Gobierno no puede cambiar ni una coma de una política que no es suya, en realidad es de Alemania y no es que la receta económica no funcione. En realidad funciona perfectamente, como un reloj.
Lo que está ocurriendo aquí se puede explicar siguiendo el ejemplo de otros países. En EEUU hay un 9% de paro. El gobierno de Obama ha puesto el paro como objetivo a combatir y por ello sigue una política adecuada. Baja los impuestos y sube la inversión pública. En conjunto sube el gasto público. Eso le provoca algún desajuste en el presupuesto y algo de inflación, pero tiene la maquina del dinero en su mano y basta con que la Reserva Federal emita dinero para que el conjunto funciones y se cree empleo en Norteamérica. Vamos a Europa. En Alemania hay un 6% de paro. El desempleo no es un objetivo a combatir. Al revés, en los países del norte de Europa es el déficit público el problema, no el paro. Y se hace una política adecuada para ello. Es decir, se suben los impuestos y se recorta el gasto público. ¿Qué pasa en España? Pues que el señor Rajoy está obligado a aplicar la política que le conviene a Alemania, de menos gasto público y más impuestos y esto genera paro. Así de claro. ¿Y por qué hacer una política que no nos conviene? Porque los bancos alemanes financian el déficit español y esos bancos y el gobierno de Angela Merkel imponen seguridad para esos acreedores. En resumen, en España no se puede cambiar ni una coma de esta política mientras no cambien las prioridades en los países del Norte, mientras Alemania no se lance a combatir el paro, cosa difícil cuando es bajo el desempleo. Así pues, aunque el 14 hubiera salido a la calle el Rey, el margen de maniobra para Rajoy se limita a decir dónde mete la tijera y para el Gobierno de Canarias, peor, porque el margen de deuda de las comunidades autónomas es muy bajo y las obligaciones de gasto enormes.
Me preguntarán dónde está el optimismo y eso digo yo. Pues soy optimista. Me pueden llamar ingenuo pero creo en nuestra gente y en nuestra capacidad de trabajo, ingenio, sacrificio y resistencia. Evidentemente no tengo datos en la mesa para afirmar que la recuperación es posible. Es fe, sólo eso, creer en lo que no se ve.

martes, 13 de noviembre de 2012

Canarias necesita otra compañía aérea


Canarias no puede seguir con el transporte que tiene. La retirada de conexiones de Iberia y otras compañías ha sido la gorta que colma el vaso de la paciencia que debe tener todo usuario, porque lejos de no ser rentables, Iberia suprimió conexiones desde Canarias que eran rentables, con ocupaciones de hasta el 85% en algunas de ellas. Las consecuencias de estos cortes son de precios más elevados por viajar y viajes mucho más largos, de casi diez horas en algunos trayectos por las escalas que hay que hacer.
Es evidente que Iberia suprime estos aviones no por los vuelos con las Islas, sino por su reestructuración interna, pero a los usuarios canarios tanto nos dan sus motivos porque lo cierto es que somos los únicos perjudicados, aparte de los empleados de esta compañía que, unos 4.500, perderán su puesto de trabajo. Pero es que Iberia ofrece nuevos datos reveladores sobre el agujero económico de su joya de la corona: los vuelos a Latinoamérica. El consejero delegado de la compañía, Rafael Sánchez-Lozano, anunció ayer que sólo un tercio de las rutas trasatlánticas ganan ahora mismo dinero. Así, de un total de 24 conexiones, apenas 8 son rentables. Esta situación, junto con la debacle del negocio doméstico, son los dos principales motivos que le han llevado a aplicar un plan de saneamiento que supondrá los despidos de la cuarta parte de su plantilla.
Para solucionar el problema del largo radio, el nuevo plan de transformación del grupo aplicará la estrategia denominada 7/14, que consiste en lograr que las rutas que se respeten tras el saneamiento de la compañía -no todas tienen que ganar dinero en la actualidad- tiendan a tener 7 frecuencias semanales (un vuelo al día) o 14 frecuencias (dos operaciones al día). Así, se optimiza el trabajo de las tripulaciones, que en algunos casos se quedan varios días de descanso en el destino hasta que regresa el avión a Barajas. El coste de pilotos y azafatas es el gran talón de Aquiles de los vuelos trasatlánticos de Iberia, que tienen que competir con aerolíneas como Latam (la fusión entre la chilena LAN y la brasileña TAM), que cuenta con unos costes de tripulación que en algunos casos son la mitad.
Sobre esto nada que decir, pero desde Canarias hace falta otra compañia aérea que no esté supeditada a estrategias superiores. Tal y como está el mercado y no hace falta añadir nada más, los canarios podemos hacer rentable una compañía aérea que haga posible conexiones con la Península, no hace falta añadir ni grandes ayudas más allá de las actuales. Hace falta la iniciativa empresarial y que los gobiernos implicados, el central y el canario no pongan problemas. Pero hace falta hacerlo ya, antes de que la factura social haga todo este deseo inmanejable.

viernes, 9 de noviembre de 2012

Un plan de verdad de empleo para 2013

Se puede hacer más por el empleo, mucho más, se puede hacer además sin poner necesariamente dinero sobre la mesa. Eso si, tiene que ser el Gobierno central el que lo haga porque tiene potestad para ello. Hago mía la propuesta de Martín Varsavsky para ponerla en marcha cuanto antes y me parece la más interesante que he estudiado.
La clave de esta nueva propuesta es quitar los dos obstáculos que hacen que las empresas no se animen a aumentar el empleo por   las cargas sociales que esto supone: las indemnizaciones y los impuestos que paga el trabajador; y pedirle al gobierno que cubra estos gastos durante el año 2013.  O dicho de otra manera: la clave es quitar al gobierno del medio en el año 2013 para generar empleo.
En esta propuesta una empresa que aumenta plantilla durante el año 2013 sobre la base que tenía en el 2012, no tendría que pagar ni cargas sociales ni indemnización por los empleados nuevos que se incorporen.  Al mismo tiempo, los empleados que entren a empresas que aumentan su plantilla no tendrían que tributar ellos mismos.  Todo esto sólo durante el 2013 y para los empleados que entren a empresas que aumentan plantilla.  Es decir, que una empresa que tiene hoy 500, 1000 empleados o cualquier número de empleados, no recibiría ninguna ayuda a menos que aumente su plantilla y el coste laboral total.  Sólo los generadores netos de empleo en el 2013 con respecto al 2012  y los empleados que entren a estas empresas recibirían esta ayuda para incentivar el empleo.  Un buen ejemplo serían las start ups o empresas nuevas que al no haber tenido empresas en el 2012 y nacido en el 2013 todos los empleados fichados por este sistema durante el 2013 estarían incentivados.
A la empresa que aumenta plantilla el gobierno le ofrecería dos ayudas. Por un lado, durante 5 años el gobierno se ofrece a pagar todos los impuestos y relativos al empleo – llamados cargas sociales  – pero en una escala decreciente y sólo a los fichados durante el 2013.  La ayuda es que el gobierno paga el 100% de las cargas sociales en el 2013, el 80% en el 2014, el 60% en el 2015, el 40% en el 2016 y el 20% en el 2017 cuando se acaban las ayudas. Esta ayuda es importante ya que en España la gente en general no sabe que para que un empleado pueda gastar neto de impuestos unos 1600 euros al mes, la empresa desembolsa por él/ella unos 2500 euros.  Por otro lado, a todos estos trabajadores que se empleen como aumento de plantilla en el 2013 el gobierno ofrece pagarles la indemnización si son despedidos con la misma fórmula: 100% en el 2013 (si corresponde), 80% en el 2014 y así hasta el 20% en el 2015 y nada en el 2018, año en que todo volvería a la normalidad. Aclaro que es menos probable que se despida y se paguen indemnizaciones porque la cohorte 2013 de empleados en una empresa va a tener una ventaja mayor sobre la cohorte 2014 que ya no va a tener ahorros. Además lo que mucha gente no entiende es que aunque por ley en España el 99% de los despidos son improcedentes y culpas del empresario,  muchos son simplemente planes de expansión que por condiciones de mercado no funcionaron. En España y mucho más en Canarias por ejemplo si uno tiene una fuerza de ventas que es capaz de lograr 10 altas nuevas por día en promedio y emplea a un comercial en ese grupo que sólo consigue 1 alta por día, mientras esta persona se presente a trabajar no se lo puede despedir por improductivo, esto sería un despido improcedente culpa del empresario.  Lo que mi plan trata es de crear condiciones que bajen el riesgo de arriesgar capital para expandir pero al mismo tiempo proteger las cargas sociales, derechos sociales e indemnizaciones del empleado.
El objetivo de este plan es sacar a gente del paro estimulando la economía. Como el incentivo es sólo por aumento de plantilla las empresas no pueden despedir para emplear de vuelta porque tienen que aumentar el total de empleados.  También habría todo tipo de provisiones para controlar que no haya despidos sino sólo ayuda a que las empresas empleen más. Entre ellas esta medida no cubriría a empresas de outsourcing o trabajo temporal para que no se cree un falso nuevo empleo.  Para el gobierno cada persona que sale del paro representa dos fuentes de mejora fiscal: al  tener que pagarles los subsidios al paro y recibir impuestos.  Con este plan el gobierno deja de pagar el paro inmediatamente y solo retrasa el cobro de esos impuestos para salir de la crisis.
 ¿Por qué promuevo esta medida y no tantas otras?  Si un emprendedor o empresario está dudando si emplear gente o no durante el 2013 debe saber que esos empleados nuevos tienen un coste más bajo inicial y un despido más bajo si no funciona la expansión es un incentivo importante para  salir a aumentar plantilla.  Y además tiene esa sensación de oportunidad, que se acaba si uno no emplea gente durante el 2013.  Al final lo que Canarias y España necesita es demostrar al mundo que sus tendencias son favorables.  Si se logra sacar a medio millón de personas del paro así, será una ayuda enorme y el principio de una tendencia de recuperación.  Además este plan, con casi 6 millones de personas en el paro, le ahorra dinero al gobierno ya que deja de pagar a los que salen del paro, estos empiezan a consumir y gastar y generar IGIC e IVA y otro tipo de impuestos y aunque cobra las cargas sociales más tarde, las cobra igual.  La clave del plan es que es sólo por el año 2013 y que es sólo para las empresas que aumentan la totalidad de su plantilla con respecto al año 2012.  Obviamente no se puede despedir a los que ahora están para fichar gente y no pagar cargas sociales porque la plantilla total no aumentaría.  Los ahorros son sólo en el incremento de plantilla no en la actual plantilla.
Otro efecto muy grande de este plan es el efecto sobre el costo país, el costo del crédito.  Las agencias calificadoras de deuda y los analistas de deuda no estudian como está el mercado ahora mismo si no la tendencia en el futuro.  Si en España se empieza a emplear gente y salen de las listas del paro cientos de miles, el riesgo país bajará hacia los niveles alemanes.  No es especialmente relevante que esta gente no tribute solo en el año 2013 porque en el año 2014 ya habrá un ahorro de pago de seguros de desempleo y a partir del 2014 se empieza a recaudar.  Abaratar el riesgo país y reconstruir el acceso al crédito es indispensable para el crecimiento y la salida de la crisis.
Una ventaja adicional consiste en el enorme incentivo del blanqueo del trabajo.  Todos sabemos que en España hay muchísimo empleado que cobra en negro.  Estos empleados querrían cotizar pero sus empleadores no quieren pagar las cargas sociales.  Pero durante el 2013 no tendría coste blanquear a los empleados y estos entrarían en el grupo de los que  el gobierno les paga la indemnización en caso de despido.  Entonces el año 2013 sería el año del blanqueo del empleo ilegal.
Luego está el tema de que los empleados mismos, que son empleados en el año 2013, no tributen.  Esto sería para crear otro tipo de incentivos.  El primero es la migración de empresas enfermas a empresas sanas.  Muchas empresas tienen demasiados empleados pero no tienen dinero para pagarles las indemnizaciones.  Los empleados, aunque lleguen a conseguir ofertas no se van porque ven su indemnización como una especie de cuenta de ahorro.  Pero cuando les ofrecen irse y no tributar por un año y luego 20%, 40%, 60%, 80% hasta el 100% en el 2018 se animarán a irse de las empresas no rentables a las rentables.  Lo mismo puede ocurrir con el tema de los empleados que hacen trampa y cobran el paro y también trabajan en negro.  En este caso al ahorrarse tributar, algunos decidirán solo trabajar en blanco.  Porque se que en España parece de mala fe decir que el empleado mismo es el que quiere hacer trampa y no el empleador, pero todos sabemos que cientos de miles de trabajadores cobran paro y trabajan full time.
Conclusión:  este plan es un rescate cardíaco a una economía que en vez de abaratar el despido que tantos piden y es una pésima idea, abarata el empleo que es lo que todos queremos.  Y hace esto dándole ventajas al empleado y al empleador durante el año 2013 para crear una nueva realidad: ahora o nunca.  Hagamos del año 2013 el año de las nuevas empresas o el año en que las empresas existentes se comportan como nuevas empresas o empresas de alto crecimiento.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Más competitividad y para qué


Hemos mejorado en productividad, podemos leer. Al fin buenas noticias económicas, pienso, pero a poco que uno rasque en la realidad puede observar que el progreso indudable experimentado en  la productividad y competitividad se ha debido sobre todo a los peores efectos de la crisis económica que nos azota más que a los esfuerzos dirigidos hacia los mejores estándares más avanzados en estas materias.
Desde un punto de vista económico, cualquier analista observa que la mejora de la productividad del factor trabajo ha venido de la mano de la continuada erosión del mercado laboral de los últimos años, cuando el objetivo debe ser el crecimiento de ambas variables como síntoma de salud económica. Como dice el Sr. Martin Varsavsky, el factor trabajo se ha abaratado en todas sus vertientes, existen muchos más trabajadores dispuestos a currar, menores sueldos, más precariedad y menores indemnizaciones por despido, todo abarata, todo hace competitivo a España o a sus empresas pero no donde se desea, sino como podría hacerlo cualquier país africano, a base de sueldos miserables, de menos tecnología, de cosas que podría hacer cualquier trabajador no cualificado.Con la tasa de paro más elevada de la zona del euro, España ha destruido más de tres millones de puestos de trabajo netos desde que comenzara la crisis en 2008, cuya primera derivada ha sido un aumento de la productividad por trabajador. En Canarias el panorama no es menos desolador, con 378.000 parados según el INE y en una espiral que va camino de los 400.000 desempleados. La productividad habría aumentado en España un 11% desde comienzos de 2008, según datos recogidos en un informe de BBVA Research, que destacaba un crecimiento de los salarios inferior a la productividad.Hasta aquí parece que mejorar la productividad es un elemento clave para la adecuada lubricación del engranaje económico de un país, pero desde luego sirve para para refrendar la sostenibilidad de su capacidad de competir en los mercados internacionales.Hay consenso entre los analistas de que la crisis de la economía global desatada por la quiebra de Lehman Brothers y el desplome del sector inmobiliario - principal motor de crecimiento del país hasta 2008 - reveló la vulnerabilidad de una economía que había crecido sobre unas bases muy endebles desde la óptica de su mejora competitiva.Canarias ha avanzado mucho, pero su patrón de crecimiento en las últimas décadas ha resultado frágil e insostenible a largo plazo, según un informe de la Fundación BBVA-Ivie de 2011, titulado 'Trayectoria y Perspectivas de la Economía Española'.
El desplome del consumo privado en un contexto de fuerte recesión económica, ha llevado aparejado una drástica reducción de las importaciones cuyo efecto más directo ha sido un salto comparativo de las exportaciones, mejorando el saldo de la cuenta corriente vía balanza comercial, principalmente.
Los últimos datos difundidos por el Banco de España mostraron una mejora de la balanza corriente gracias a la balanza comercial que, hasta agosto, arrojó un crecimiento de las exportaciones del 7,4 % interanual, mientras las importaciones se contrajeron un 2,6%.
Lo que tenemos que tener en cuenta es que las exportaciones han mejorado, que las empresas españolas se buscan la vida fuera para seguir operativas, pero cuando los números se trasladan a Canarias el panorama lo veo negro. Aquí se sigue exportando lo mismo siempre: Plátanos y tomates, el resto muy poca cosa y con empresas tan pequeñas el ser más competitivos no nos hace exportar, porque Canarias no tiene qué. Pero es que además, la pérdida de conexiones ha hecho que las Islas sean un destino turístico caro ya, carísimo. Así que como resumen se puede concluir que los canarios somos más competitivos a base de vivir todos peor, pero no podemos aprovecharlo.

martes, 6 de noviembre de 2012

El paro apunta y dispara


Las últimas cifras de paro que ofrecieron los Servicios Públicos de Empleo son de las que hunden la moral del más optimista, pero al retroceso del desempleo en Canarias de 993 personas en octubre, pero que reflejan el profundo deterioro del mercado laboral español y ponen de manifiesto una situación decadente que no se espera que mejore en los próximos meses. Así, lo seguro es que estos datos vayan aún a peor durante el próximo año.
Escudriñando un poco las cifras descubrimos que el número de personas en paro que no recibe ningún tipo de prestación se ha disparado hasta niveles nunca vistos en la economía española: más de dos millones de parados no cobran ninguna prestación, que en Canarias suman unas 126.000 personas. Así, la tasa de cobertura, que es el índice que trata de medir el nivel de protección de los desempleados, ha caído hasta el 63,5 %, el nivel más bajo en los últimos seis años.

Aún más desconcertante si cabe es que el gasto por desempleo ha crecido el 5.9 % y resultará imposible cumplir el presupuesto. Las prestaciones suman en lo que va de año 23.700 millones de euros, lo que representa el 83 % de lo presupuestado para todo el año. ¿Qué hará el Gobierno para cubrir una desviación que a final del ejercicio será de más de 3.000 millones? La única opción que le queda, excluyendo más deuda es otra vez meter mano de nuevo a la hucha de las pensiones, con todo lo que ello conlleva.
La paradójica situación es, por tanto, desesperante y resulta inaudito que a pesar de que el gasto en prestaciones crezca y desborde las infundadas previsiones del Gobierno, cada vez sean más los parados que no tienen protección. ¿Qué futuro puede depararle a un país una situación tan extrema como esta? Deberíamos de dejar de mirar hacia Grecia o Portugal y darnos cuenta de la decadente situación de nuestro país, inmerso en un viaje de ida hacia la pobreza para el que nadie nos ha preparado y del que nadie piensa sacarnos.