lunes, 29 de julio de 2013

Siete errores que no hay que cometer en una entrevista de trabajo

Las entrevistas de trabajo no suelen tener una gran duración, pero precisamente por eso los errores que pueda cometer el entrevistador tienen un gran peso y puede llevarle a hacer una valoración equivocada sobre el candidato.

Para evitarlo debemos asegurar la creación de un ritmo de trabajo relajado y tranquilo, planificando una duración suficiente y un lugar adecuado, además de preparando la entrevista para evitar en lo posible la improvisación.

El error está en el detalle
Una entrevista laboral se puede estructurar, pero aún así el error puede aparecer en los pequeños detalles. No debemos pensar que por ser pequeños no son relevantes. Así, encontramos los siguientes:
Un saludo seco. Algo tan básico como el saludo puede marcar la actitud del entrevistado, por lo que hacerlo de forma seca o desinteresada puede desanimarle o hacerle sentir incómodo.
No tomar notas durante la entrevista nos impedirá despejar todas las dudas ni realizar valoraciones a posteriori. No debemos confiar en exceso en nuestra memoria.
Tomar demasiado protagonismo. Las entrevistas deben servirnos para hacer un retrato del perfil del candidato, por lo que debemos permitir que se exprese y que hable más que nosotros.
No despejar dudas. Si no tomamos notas y tomamos demasiado protagonismo, este error cae por si mismo, aunque puede cometerse aún sin cometer dichos errores. Tenemos que hacer preguntas cuando existan sombras sobre cuestiones importantes para el puesto o vacíos de información en lo comunicado por el candidato. Igualmente debemos despejar las que tenga
No usar un cuestionario tipo es un error bastante habitual que puede hacer que las entrevistas difieran demasiado una de otras, haciendo que el proceso no siga un guión específico con el que juzgar la idoneidad de todos los candidatos por igual. Aún así, la presencia de un cuestionario no significa que no podamos abrir la conversación de forma natural.
Dar vueltas en círculos es un error común en las entrevistas mal preparadas. Debemos tratar de ir al grano y evitar que la conversación se prolongue de forma no productiva, ya que muestra desinterés, confunde al candidato y no nos proporciona elementos de juicio.
No darle importancia a la despedida. Hay que ser amables hasta el final del proceso y comunicar con el candidato posteriormente ya sea elegido o no. La imagen de la empresa también se expresa en las entrevistas.

Con una buena planificación y dando la importancia que merece la entrevista, estos errores no deberían aparecer. Aún así es bueno recordarlos de vez en cuando porque en algunos casos hablamos de pequeños detalles que podemos dejar de considerar con el paso del tiempo.

viernes, 26 de julio de 2013

El monedero electrónico en el móvil, un misterio que no se use más

Una de las cuestiones de las que se lleva tiempo hablando y todavía están por popularizarse son los sistemas de monedero electrónico en el móvil. Se trata de una forma sencilla para el consumidor para realizar pagos de forma rápida, cómoda y segura. Para el comercio es una oportunidad para explotar y conseguir fidelizar al cliente, ya que además de pagar podemos aprovechar otras características que nos permiten los teléfonos móviles de los usuarios.

Si todo son ventajas, ¿por qué no está más extendido o no lo utilizamos a diario a nivel de la calle? Esta es la pregunta que muchos podrían hacerse, tanto usuarios como comercios que podrían mejorar sus ventas gracias a este tipo de sistemas. Son múltiples los factores que se pueden dar, pero entre ellos destacaría por encima de todo que el nivel de uso de las tarjetas de crédito se encuentra muy extendido en nuestro país.

A esto se suma también que el número de cajeros que hay distribuidos es muy alto, por lo que siempre está a mano un lugar donde podemos obtener efectivo. Por último añadiría que la mayoría de los comercios ya han realizado inversiones o tienen en marcha TPVs para el pago con tarjeta de crédito, lo que para las cantidades más altas resuelve en el mayor número de casos el problema.

Tendencias en el uso de los monederos electrónicos
Sin embargo existe una ventana de oportunidad para esos pagos menores de menos de 20€, que es donde parece que el monedero electrónico integrado en el móvil tiene una oportunidad para acceder al mercado. Por lo menos en el sector de entrada. Después ya es posible que el usuario se acostumbre y acabe por pagar con este método compras por un valor mayor.

El principal problema es que para el usuario de la calle se puede producir cierta confusión entre las distintas plataformas que hoy por hoy intentan hacerse un hueco en el mercado,Google Wallet, el Passbook de los iPhones o las propuestas de distintos actores en los pagos como Visa o PayPal, por citar algunos ejemplos. Es un mercado emergente y no acaba de imponerse ninguna, con lo cual tampoco hay una solución más o menos estándar que sea imitada por el resto.

Además muchas de estas soluciones hacen uso de la tecnología de comunicación por proximidad, el NFC (Near Field Communication) que permite realizar el pago sólo con acercar el móvil que tiene soporte para esta tecnología al terminal de pago. Y esto es un problema, ya que esta tecnología no la incorporan todos los terminales, sino los más avanzados. Esto reduce, por el momento, el número de clientes potenciales que podrían realizar pagos con este sistema.

Y ¿quién está apostando por esta tendencia? Pues tenemos a distintos actores ya sean compañías de tarjetas de crédito, sistemas operativos móviles, como Android o iOS, o dicho de otra manera Google y Apple, que además ya cuentan con datos de pago de millones de usuarios para poder comprar en sus tiendas de aplicaciones. También las compañías de comunicaciones quieren una parte del negocio.

Ventajas para el cliente del uso del monedero electrónico
Pero, ¿cuáles son las ventajas para el consumidor? Pues una de ellas es la rapidez. Imaginemos un gran centro comercial, en Navidades o en rebajas. Un momento donde se generan grandes colas y consumidores que dejan de comprar simplemente porque no quieren esperar tanto tiempo. Un par de terminales de cobro por proximidad pueden ayudar a agilizar los pagos y no perder estas compras.

Otra de las cuestiones interesantes es que el móvil se ha convertido en un elemento tan imprescindible que siempre viaja con nosotros. Nos podemos olvidar incluso la documentación pero el teléfono móvil será raro que nos lo olvidemos. Y si podemos pagar con él, siempre tenemos la posibilidad de realizar pagos.

Pero además el pequeño comercio tiene capacidad para detectar enviar descuentos y ofertas para los clientes, lo que permite la fidelización de los mismos. Hoy por hoy esta es una herramienta que utilizan mucho las grandes superficies, pero que en el caso de pequeños negocios no está tan explotada. Una compra que automáticamente nos genera un descuento de X en la próxima que realicemos incitará al cliente a volver o aprovechar este descuento antes que buscar una alternativa.

Por último, permite al usuario un control del gasto de forma sencilla para los usuarios, sobre todo esos gastos menudos que luego no sabemos dónde se han ido y el resultado final es que tenemos que volver a pasar por el cajero para tener un poco más de liquidez.

Un sector en crecimiento pero con algunas incógnitas por resolver
Una parte del futuro de los pagos con monedero electrónico tiene que ver con el de las tarjetas de credito. Pero sobre todo con la extensión de alguna de las grandes plataformas que apadrinan el pago por móvil o el soporte para el NFC en la mayoría de los terminales que están en el mercado, algo que llegará poco a poco.

Pero también tiene que ver con la madurez del servicio y los hábitos de pago, algo que sólo se logra con un poco de tiempo. En este sentido la expansión de los teléfonos móviles hace que sea factible su extensión masiva. Depende mucho del grado de utilidad que entre todos los actores consigan darle, tanto para usuarios como para comercios.

miércoles, 24 de julio de 2013

Claves para una buena comunicación interna

La comunicación en la empresa ya se sabe que es de vital importancia para que las cosas marchen bien. Comunicar es necesario en todos los ámbitos y a todos los niveles, entre personas de distintas características, por lo que no resulta una tarea trivial, sino que debe ser ejecutada con criterio.

A nivel interno, la importancia sigue siendo alta. La comunicación interna en la empresa es una herramienta necesaria para coordinar todos los niveles de la organización, desde los socios, hasta la última persona que se haya incorporado al equipo. En esta entrada, vamos a ver algunos puntos que ayudan a garantizar que se comunica bien a nivel interno en la empresa:

Entender la comunicación como un proceso
La comunicación debe ser entendida como un proceso, el cual requiere una estrategia y el despliegue de unos medios para soportarla. La comunicación es un proceso y como tal, debe ser “parametrizado” en función de factores como el destinatario y del tipo de mensaje.

La comunicación no debe ser entendida como una obligación o como una distribución de secretos empresariales. Debe ser interpretada como algo natural, que es necesario para que los engranajes de la empresa estén a punto y todo funcione como debe. Comunicar es importante, para que las personas puedan estar alineadas, buscando un único objetivo común.

Modular el mensaje
El mensaje a transmitir debe ser siempre modulado en función del destinatario al que se envía. No es lo mismo dirigirse a los socios en una junta de accionistas, que hablar con un empleado recién llegado, que hacerlo con otro que lleva años trabajando con nosotros. No es lo mismo hacerlo a un colectivo, que hacerlo a una única persona. Tampoco es lo mismo comunicar buenas que malas noticias, o derechos que obligaciones.

El mensaje a transmitir y el destinatario son los dos factores principales que condicionan la manera de comunicar. Además, hay factores adicionales, como el entorno, que pueden requerir que una comunicación se haga con una especial sensibilidad. Por ejemplo, cuando desde la empresa se dirige a un empleado que acaba de recibir una mala noticia a nivel personal por motivos médicos.

Siempre hay que construir una comunicación adecuada al receptor del mensaje, con el objetivo de que cada uno pueda comprenderlo de la manera más eficiente posible
La comunicación interna debe apoyarse en herramientas adecuadas

Una buena comunicación requiere herramientas acordes con el mensaje que se quiere transmitir. La comunicación de palabra, un blog interno, el correo electrónico, una carta, entre otros, son canales que deben combinarse para que el mensaje llegue en todo momento sobre el soporte adecuado.

La comunicación de palabra es un canal que no siempre se usa de manera adecuada. A veces, se comunican cosas por este canal que no deberían y, en otras ocasiones, se peca de todo lo contrario, de no hacerlo. Comunicar las buenas noticias de viva voz y a los cuatro vientos, es algo sencillo. Cuando las cosas pintan mal, las palabras no fluyen con tanta facilidad y cuesta más dirigirse a otras personas de manera directa con la palabra.

Un ejemplo lo tenemos a la hora de hacer despidos: hay quien decide despedir a personas que han trabajado bien por carta, por email o incluso por medios tan poco personales como el sms; y hay quien decide hacerlo bien, usando la comunicación verbal para explicarle a la persona cesada que no hay un sitio para ella en el equipo.

Un último apunte sobre las herramientas es que para soportar bien la comunicación no hace falta que sean complejas, ni siquiera hace falta que sean las más potentes del mercado, sino todo lo contrario. Basta con aplicar el sentido común y usar medios y plataformas sencillos que permitan incorporar mensajes desde el emisor para que lleguen de manera adecuada a los destinatarios. Herramientas tan sencillas como una lista de correo, un blog o un boletín, permiten que la comunicación fluya de maravilla.
La comunicación interna necesita ritmo

La comunicación requiere ritmo para que la información circule con fluidez. Hay información puntual, que surge cuando surge, pero otra que es cíclica (resultados mensuales, nuevos clientes, altas y bajas en la empresa, entre otras) y que es bueno que se comunique de manera periódica para que todos los colaboradores puedan disponer de su dosis de información cada cierto tiempo.

Recibir una dosis de información programada hace que la gente incorpore como tarea informarse sobre la empresa en su agenda, lo que favorece que las personas dispongan de una mejor visión del negocio y puedan aportar en aquellos puntos donde se vean capaces.

Hay que favorecer la comunicación informal
Las plataformas de comunicación resultan muy útiles y la comunicación formal que contienen queda muy “bonita”, pero se necesita algo más. Ese algo más es la comunicación informal, es decir, la que se produce entre las personas pero que no está sujeta del todo a los parámetros del entorno de trabajo. La empresa necesita favorecer la comunicación informal, con el objetivo de que haya una mejor conexión, más íntima, entre las personas que colaboran en los distintos equipos.

En el trabajo se pasan muchas horas cada día, por lo que conviene que la empresa ponga algo de su parte para favorecer la comunicación informal que permite conectar a sus colaboradores con asuntos que nada tengan que ver con el negocio. En este sentido, disponer de espacios para el descanso (salas para comer o para tomar un tentempié durante la jornada) y organizar eventos (cenas, excursiones, charlas, deporte, entre otros), favorecen la comunicación informal, necesaria como cualquier otra.

lunes, 22 de julio de 2013

Lo feo de las inversiones inmobiliarias

La inversión inmobiliaria se ha visto durante muchos años como algo ideal. Comprar un piso para alquilar en la época de la burbuja parecía la forma ideal de hacerse rico. El valor de la vivienda subía y además teníamos unos ingresos recurrentes. Si podíamos alquilar una vivienda por 600 euros, tres viviendas nos darían unos ingresos brutos de 1.800, un sueldo con apenas esfuerzo, o tal vez todo lo contrario.

Pero lo cierto es que la inversión inmobiliaria en vivienda tiene unos aspectos bastante feos que no se suelen tener en cuenta por parte de aquellos que optan por invertir en viviendas o que heredan una y deciden mantenerla como inversión. De hecho, casi nadie suele mirar el lado oscuro de la inversión inmobiliaria.

Aspectos feos de la inversión en vivienda
Costes de transferencia: la vivienda como vehículo de inversión está sometida a unos fuertes costes de entrada y salida o de transferencia. Comprar una vivienda nueva nos requiere pagar IGIC y una usada el ITP y AJD, además de notario y dedicar cierto tiempo. No es raro que los pisos se hereden y no se quieran cambiar por otros más adecuados para el alquiler por los fuertes costes que tienen. Comparémoslo con comprar acciones cómodamente desde nuestro ordenador de casa.

Además arrendar una vivienda no supone exclusivamente firmar un contrato y recibir una renta, sino que hay que gestionar la relación con el inquilino o la comunidad de vecinos. Además el propietario es responsable de las reparaciones de la vivienda o el mantenimiento. Este tipo de gastos no se suelen tener en cuenta cuando se alquila una vivienda.

Por último está el tema de impagos. Aunque la mayor parte de los inquilinos pueden no dar problemas, es una minoría la que asusta a los propietarios de una vivienda. No hace falta llegar a extremos en el que el inquilino paga únicamente el primer mes y no se va hasta que es obligado judicialmente dejando la vivienda en malas condiciones, pero decirle a una persona que tiene que abandonar su casa durante años porque ya no se puede permitir pagarla, no es un plato fácil.

A pesar de ello, la inversión inmobiliaria puede ser una buena elección para mucha gente, no obstante, hay que ser completamente conscientes de los contras de la misma antes de lanzarse a alquilar, cuando tal vez otras opciones (como la bolsa, los fondos de inversión, la deuda pública…) se adapten mejor a nosotros.

martes, 16 de julio de 2013

Lo que hay que saber sobre el contrato en prácticas del primer empleo

El contrato en prácticas para el primer empleo se encuadra dentro del marco contractual de prácticas ya existente, permitiendo ahora que las empresas contraten a personas menores de 30 años beneficiándose de una reducción del 50% de la cuota a la Seguridad Social por contingencias comunes en dichos casos. Por tanto, estamos ante ayudas para aumentar el número de contratos a jóvenes.

Además, si la empresa decide contratar en prácticas para el primer empleo a personas que actualmente estén desarrollando prácticas no laborales en la organización (es decir, que no tienen contrato con la empresa), por estos nuevos empleados la bonificación se ampliará hasta el 75%.

A diferencia de los contratos de prácticas y de prácticas para el primer empleo, hablamos de una relación no laboral, a que no existe relación directa con la empresa. Se puede aplicar a jóvenes de entre 18 y 25 años, desempleados e inscritos en el SEPE, que posean una titulación universitaria, de formación profesional, de grado medio superior o equivalente.

Además, estas personas no deberían haber tenido ninguna experiencia laboral superior a tres meses en la misma actividad, sin tener en cuenta las prácticas realizadas para obtener su título. En definitiva, hablamos de un modelo que ofrece experiencia laboral, pero que el gobierno nos está invitando a abandonar a favor del contrato en prácticas para el primer empleo.

Todo lo relacionado con este tipo de prácticas se puede encontrar en el Real Decreto 1543/2011 de 31 de Octubre de 2011, con el que se regularon dichas prácticas.

¿Qué supone el contrato en prácticas para el primer empleo?
Sin tener en cuenta las prácticas no laborales, hay dos modalidades de contrato: la tradicional y la de primer empleo. Entre ellas existen algunas diferencias importantes.

La principal radica en la edad de los trabajadores que pueden ser contratados, ya que en el formato tradicional no se establece ningún tipo de límite, ya que solo se atiende al tiempo que haya pasado desde la finalización de los estudios: que no hayan pasado cinco años desde dicho momento, o siete en caso de personas con discapacidades.

Además, el formato tradicional no cuenta con bonificaciones. El único caso en el que existe una bonificación en este caso sería en el momento de la transformación en un contrato indefinido, con 500 euros en el caso de los hombres y 700 en el de las mujeres.

El contrato para el primer empleo establece un margen de edad que termina a los 30 años, sin contar con periodos mínimos desde el fin de los estudios, y con bonificaciones del 50 o del 75% según el caso, como ya hemos comentado. La bonificación se mantiene durante toda la vigencia del contrato.

No se establece ninguna limitación ni condiciones adicionales para concertar estos contratos, ya que no se obliga al empresario a mantener el nivel de empleo alcanzado con las nuevas contrataciones, al contrario de lo que ha sucedido con los otros contratos que han surgido este año.

Para poder disfrutar de las bonificaciones propias del contrato en prácticas para el primer empleo, debe formalizarse la relación mediante el modelo PE/176 del SEPE, marcando las opciones que hacen referencia a la edad del empleado en prácticas y a los requisitos necesarios para acceder a las bonificaciones citadas.

Estas se aplicarán automáticamente al realizar los modelos TC1 y TC2, si hemos completado correctamente el modelo PE/176.

Puede establecerse un periodo de prueba para estos empleados, tanto en las prácticas tradicionales como para las de primer empleo, se podrá establecer un periodo de prueba. Siempre que, por supuesto, no lo prohíba el convenio colectivo aplicable de forma expresa.

En cuanto a su duración, no podrá ser superior al mes cuando los empleados en prácticas posean un título de grado medio o certificado de profesionalidad 1 o 2, ni mayor a dos meses cuando posean un título de grado superior o certificado de profesionalidad de tipo 3. Recordamos además que, una vez finalizado el periodo de pruebas, no podrá abrirse uno nuevo y que este contará a efectos de antigüedad.

La retribución del trabajador en prácticas, sea en su modalidad tradicional o de primer empleo, no podrá ser menor al 60% del salario mínimo (o salario fijado por convenio para dicha categoría o puesto) durante el primer año de contrato, ni menor al 75% del mismo durante el segundo.

lunes, 15 de julio de 2013

La trampa de la productividad en las empresas

Vivimos la era de la distracción y de la sobreestimulación. Muchos son los riesgos de caer en una improductividad manifiesta, también en el plano empresarial. En el día a día, son muchas las trampas que se deben esquivar para mantener intacta la productividad en cualquier compañía. El correo, las reuniones o las redes sociales son algunas de las que vamos a desgranar.

Correo electrónico
Es, quizás, la trampa más potente de las que la empresa y el profesional se pueda encontrar a diario. Si en su gestión no reina el control exhaustivo en el uso, la mesura y el sentido común para organizar su consulta puede ser una herramienta que robe, a la postre, mucho más tiempo del que nos podemos imaginar a priori. Sólo tienen que comprobarlo un día normal en el que no haya una planificación: sumen el tiempo que le dedican a consultarlo.

Imponerse horas concretas para su consulta; eliminar las notificaciones push, para evitar la tentación a pinchar y la potencial distracción; cambiar el chip y pensar que contestar al minuto no significa hacerlo mejor son algunas de las medidas que se pueden tomar para esquivarla.
Reuniones inservibles
Celebrar reuniones para cualquier cuestión no implica, en absoluto, ser más productivo y avanzar en los asuntos pendientes. En la mayoría de las ocasiones significa justo lo contrario: una pérdida de tiempo evidente. Y lo es cuando se trata de ‘despachar’ asuntos a través de reuniones, cuando, probablemente, sea necesario, como mucho, un correo electrónico.

Hay que medir muy bien los encuentros que se celebran, los contenidos, el tiempo que se les dedica y los objetivos. Es la mejor manera de enfrentarse a ellas de una manera productiva y, por tanto, haciendo una selección natural y celebrar sólo las que son estrictamente imprescindibles.
Interrupciones de compañeros
Según diversos estudios, las interrupciones de compañeros en la oficina son una de las causas de pérdida de tiempo y, por ende, de productividad más sufridas. Si la plantilla es extensa, pueden ser muchas las ocasiones en las que alguien se te acerque para hablar, ya sea un tema importante o una nimiedad.

En estos casos, se debería establecer un ‘pacto’ a través del cual las interrupciones sean por motivos urgentes. Si es posible, avisar para que no den entrada a llamadas y advertir a los compañeros de que necesitas concentración. No hacerlo puede convertirse en una trampa, porque recuperar el foco tras varias interrupciones en la mañana puede implicar una reducción importante de la productividad.
Redes sociales
El uso de las redes sociales en la empresa puede ser positivo. Prohibir su uso no tiene por qué ser la salida para evitar que se conviertan en una trampa. Sí que es necesario un cierto control y un acuerdo tácito para que no sean una fuga interminable de tiempo. Para ello hay que implicar a toda la plantilla, formarla, sin prohibiciones que serán, a todas luces, contraproducentes.
Sin objetivos
A veces, las empresas (y, de forma indirecta, sus trabajadores) yerran al no plantear unos objetivos claros en su estrategia. No colocar unas metas concretas a corto, medio y largo plazo hace que, en cierta manera, se pierda el sentido al esfuerzo y se diluyan por tanto las razones para la organización del día a día. Es por eso que la planificación con deadlines concretos puede ser muy útil para recuperar esa motivación y, por tanto, esa productividad necesaria.

Como se puede ver, se trata de cinco trampas que pueden ser esquivadas con medidas concretas. Obviarlas puede hacer que, casi sin percatarse, la fuga de productividad sea inevitable.

lunes, 8 de julio de 2013

La terrible realidad de los parados mayores de 45 años

En el primer trimestre de 2013, la Encuesta de Población Activa arroja un dato que por conocido no es menos llamativo. Contamos con unos 31 millones de individuos entre los 16 y los 65 años – aquellos a los que comúnmente denominamos individuos en edad de trabajar. Al desagregar este colectivo por edad, se observa que sólo el 22% tiene menos de 30 años, el 39% tiene entre 30 y 45 años y el 38% tiene más de 45 años. Estamos hablando prácticamente de 12 millones de individuos entre 46 y 65 años, lo que revela el enorme proceso de envejecimiento en el que nuestro país y en consecuencia, nuestro mercado laboral, está inmerso. Sin embargo, no todo este colectivo está activo, es decir, ocupado o desempleado. En concreto, unos 6.200.000 son ocupados y 1.675.072 son desempleados. Aunque solo fuera por su magnitud, este grupo de individuos mayores de 45 años que o bien trabajan o quieren trabajar pero no pueden merece una atención. De ellos me ocuparé en esta entrada.

Al analizar en detalle a este colectivo, uno se sorprende por una serie de datos que no son precisamente muy halagueños.
El primer dato que quiero mencionar se refiere a la evolución de la magnitud de este colectivo. La siguiente figura da cuenta de la enorme escalada que se ha producido en el número de desempleados de esta franja de edad:


Si consideramos el cambio ocurrido desde 2007, el número de desempleados de esta edad se ha multiplicado por cuatro, es decir, por cada desempleado de esta edad en 2007 hoy tenemos más de cuatro.

El segundo dato relevante es su distribución por edad: No es lo mismo que la mayoría de este colectivo esté cercano a la jubilación o que se encuentre cerca de los 45 años. Lo que la figura de abajo revela es que la inmensa mayoría de estos desempleados (casi el 75%) tienen menos de 55 años y en consecuencia están lejos de la edad oficial de jubilación.

Un tercer dato importante se refiere al nivel de estudios que este colectivo presenta. El siguiente cuadro ofrece esta información para el último dato disponible, que es el primer trimestre de 2013.

El dato más preocupante de esta tabla es claramente que casi el 70% de los desempleados mayores de 45 años no tiene un nivel educativo más allá de la educación obligatoria.

El cuarto y último dato no menos demoledor se refiere al tiempo de permanencia en el desempleo de este colectivo. El siguiente gráfico nos ofrece la distribución (%) de los desempleados mayores de 45 años (tanto en 2007 como en 2013) según el tiempo que llevan desempleados.

El que uno de cada tres desempleados mayores de 45 años lleve más de tres años en esa situación es ciertamente demoledor. Si bien esto sucede tanto en 2007 como en la actualidad, la magnitud absoluta de cada colectivo no tiene nada que ver. En 2007 hablamos de algo más de 100 mil individuos, mientras que en 2013 hablamos de medio millón de personas.

Y la pregunta del millón: ¿Qué se puede hacer para que este colectivo, la mayoría de ellos menores de 55 años, pueda volver a encontrar un empleo? Sin el diseño de políticas activas dirigidas específicamente a este millón largo de individuos cuya formación reglada es claramente insuficiente será del todo imposible que se reincorporen al mercado laboral.

Sin embargo, junto a medidas que mejoren la empleabilidad de estos trabajadores, es necesario que las empresas demanden sus servicios. Y por lo que el Observatorio Laboral de la Crisis revela trimestre tras trimestre, su edad supone en sí misma una desventaja casi insuperable para que una empresa acceda a contratarles. ¿Se debiera, tras una adecuada formación, bonificar su contratación (indefinida) suficientemente para que su contratación fuera claramente atractiva para las empresas? Sinceramente, creo que sí. Si no, me temo que por mucha formación, incluso adecuada, que se ofreciera a estos trabajadores, su edad será siendo una barrera infranquable para su contratación. Si debiéramos empezar por un colectivo al que pudiera aplicarse una “tarifa reducida” indefinida suficientemente atractiva en las cuotas a la SS, creo que se debiera empezar por estos trabajadores. No podemos permitir que a esta edad se queden ellos y en muchos casos sus familias enteras excluidos del sistema, viviendo en el mejor de los casos de unos subsidios que les condenan a la marginalidad.

Planteo esta opción como experiencia piloto. El colectivo es suficientemente importante como para que esta posibilidad se explore seriamente, se cuantifique y se estudie su posible implementación.


miércoles, 3 de julio de 2013

La productividad como asignatura pendiente

He escrito ya varias veces sobre productividad y de su importancia para mejorar el crecimiento de la economía y también hemos hablado de cómo mejorarla. Viendo las muchas medidas anunciadas y las muchas menos medidas tomadas, está claro que la mejora de la productividad no está alto en la lista de prioridades de nuestros líderes. Aunque reconocen que es importante, sus acciones y sus medidas introducidas no van en esa dirección.

Sólo hay que ver la tan alardeada reforma laboral, acordada entre el gobierno, la patronal y los sindicatos, que resultó ser una reforma para flexibilizar los trabajos y los sueldos. Es decir, para hacer más fácil el despido y la reducción de sueldos.

Parece increíble que el enfoque de estos líderes políticos, empresariales y sociales sigue siendo facilitar el despido y reducir los sueldos, muy llamativo en España con tan alto y creciente desempleo y con casi todos los sueldos mileuristas.

Creo que la reforma laboral era necesaria e imprescindible . Para poder competir, las empresas tienen que poder estar en las mismas condiciones que las empresas de nuestro entorno. Ahora bien no se tiene en cuenta que despedir más fácil y bajar lo sueldos no tienen ningún impacto sobre la productividad y que no se ha puesto en marcha ninguna acción que vaya encaminada a mejorar esa productividad.

Sigo intentando ver cómo conseguir que aprendan los líderes políticos, empresariales y sociales de cómo realmente mejorar la productividad de una economía y por eso me interesó un estudio que nos da algunas pistas.

Las conclusiones del estudio es qué países estarán más cerca de mejorar su productividad si aglutinan varias condiciones en su infraestructura gubernamental, cultural y natural. Una infraestructura favorable ayuda a un país, mediante la estimulación de la acumulación de capital humano y físico y fomenta la productividad total de los distintos factores. Un país con alta productividad:
- tiene instituciones que favorecen la producción sobre la diversión;
- la economía está abierta al comercio internacional;
- tiene al menos algo de propiedad privada;
- habla un idioma internacional;
- se encuentra en una latitud templada lejos del ecuador.

España cumple con casi todas estas pero está claro que no se ve los resultados y Canarias también, pero viendo el enfoque de los líderes, no se mejorará.

martes, 2 de julio de 2013

Las lecciones empresariales de la salida a bolsa de Facebook

El pasado mes de mayo se cumplió un año de uno de los estrenos bursátiles más esperados de los últimos años. Facebook, la red social fundada por el joven Mark Zuckerberg, se disponía a aterrizar en el parqué norteamericano bajo unas expectativas altísimas y con muchas voces de sobrevaloración y burbuja en el debate. Trece meses después, cotiza un 40% por debajo del precio de salida.

Ante esta realidad, su salida a Bolsa, la estrategia seguida y todo lo que ha rodeado a la operación deja lecciones para las empresas. Algunas de ellas las vamos a desglosar en este artículo:

La inutilidad de previsiones irreales
Las previsiones en las empresas sirven para tener una idea básica de hacia dónde debe ir la empresa y cuáles serán las escalones que irá superando. Son útiles para establecer la estrategia y un plan concreto. Pero si no están basadas en la realidad, si están construidas desde el irrealismo, pierden toda su funcionalidad.

Es lo que le ocurrió a Facebook. El plan sobre el papel invitaba a que todo saldría bien. Cifras imponentes, evolución imparable, confianza de quien tenía que tenerla... Pero, todos esos cimientos se derrumbaron desde el mismo momento en el que la compañía se enfrentó a la cruda realidad. Todos esos papeles se convirtieron en agua de borrajas en muy poco tiempo.
Sobrevalorar capacidades, mal camino

Las empresas deben ser conscientes de sus puntos fuertes, de sus cualidades a explotar para lograr una buena posición en el mercado. En eso estamos de acuerdo. Pero, cuando la valoración de esa capacidad propia es excesiva, cuando crees que tus cimientos son mucho mejor de los que son, el tropiezo está casi asegurado.

En el caso de Facebook, no fue tanto una sobrevaloración interna, que también, sino externa. La euforia que ha rodeado el mercado de las redes sociales fue la principal causa de una valoración bursátil que fue, a todas luces, exagerada y que el tiempo se ha encargado de confirmar. Se empezó cotizando la acción a unos 40 dólares y hoy no sobrepasa los 25.
Encontrar el mejor momento, importante
Las decisiones estratégicas de una empresa no sólo deben tomarse basadas en una justificación suficiente, sino también en un calendario que no se vuelva contra ti cual boomerang. Encontrar el mejor momento para poner en marcha la maquinaria, para ampliar capital, para buscar financiación o para dar el salto a la exportación (por citar sólo tres ejemplos) es vital.

Zuckerberg se dejó llevar por esa euforia de la que hablábamos antes. Se lanzó a la piscina con muy poca agua y en un momento que, quizás, no era el idóneo. La precipitación le jugó una mala pasada. Algo que ha sido aprendido por Twitter que, aún con sus planes de aterrizar en el parqué norteamericano en el medio plazo, echó el freno para evitar repetir la misma historia.
Sin modelo de negocio no habrá ‘paraíso’
Uno de los principales motivos de castigo para Facebook ha sido la ausencia de modelo de negocio. En esta nueva ‘era’ de las puntocom, las valoraciones y los pasos dados por muchas empresas se centran, en demasiadas ocasiones, en las cifras de usuarios y audiencia y menos en los ingresos y los planes para conseguirlos a corto o medio plazo.

Facebook ha superado los 1.000 millones de usuarios (aunque haya que distinguir ahí cuáles son activos y cuáles no). Sin embargo, su capacidad para generar dinero de ellos está aún por demostrar, aunque ya está avanzando, especialmente en el ámbito móvil. Ese fue uno de sus principales hándicaps y, por tanto, una de las causas del castigo posterior.

lunes, 1 de julio de 2013

El golf y las empresas

El golf es un deporte maravilloso, al menos es lo que sentimos muchos de los que tenemos la suerte de poder practicarlo. Es un deporte para todos, lejos de las creencias populares sé que es un deporte elitista, como lo demuestran buena parte de las casi 300.000 licencias de golf que actualmente dadas de alta en España y el gran auge en Canarias. Lo confieso, a mi también me cautivó el golf, pero además hay enseñanzas útiles que se pueden extraer de esta actividad y son de aplicación, al menos teórica en las empresas.

Una de las principales virtudes del golf es que permite socializar con las personas con las que se comparte un partido, o después de terminar un recorrido. Esto resulta especialmente interesante a la hora de hacer negocios. Además, el golf también resulta útil en el entorno empresarial, por ejemplo, gracias a las lecciones para los negocios que se pueden extraer tras una ronda de golf de 18 hoyos.

1 El rumbo lo marcas tú
Los malos jugadores de golf se quejan cuando la bola no va al lugar deseado, echándole la culpa de sus fallos material, al viento, la bola, al campo, o a cualquier otro elemento externo que, en realidad, es cualquier cosa menos al verdadero culpable de que la bola repose en un lugar no deseado: el jugador.

En la empresa, sucede lo mismo. Es el empresario y los socios quienes determinan el rumbo del negocio. Ni el mercado, ni la regulación, ni los precios, y otras disculpas que se nos puedan ocurrir son las responsables de los buenos y malos resultados de la empresa.

2 La tradición se transmite de padres a hijos, pero sin forzar
Muchas personas comienzan a jugar golf heredando la afición de sus padres, quienes a su vez habían heredado de los suyos. Es un deporte en el que la tradición familiar cuenta mucho, dado que pueden practicarlo perfectamente miembro se distintas generaciones de incluso competir entre ellos de igual igual sin embargo, es una tradición que fluye siempre cuando se hace de manera natural, es decir no se pueden poner al niño que juega golf porque entonces no le gustará.

En la empresa, de la misma manera, en muchos casos existe una tradición familiar que hace que los hijos continúen con los negocios que ha montado sus padres o generaciones anteriores. De la misma manera que en el golf, esta tradición, por mucho que Padre me guste que su hijo continúe con su negocio, no siempre tiene porque cumplirse. Igual que es bueno practicar varios deportes, además del golf, también lo es trabajar en otros negocios antes de continuar con la empresa familiar y, si el golf o el negocio familiar no engancha, no pasa nada por dedicarse a otro.
3 Lo importante es la acción
Cuando juegas al golf dicen que es bueno imaginarse el golpe que quieres pegar antes de nada. Visualizarlo en tu mente antes de ejecutarlo, para poder así tener la mejor disposición para pegarlo. Se trata un ejercicio que suele dar buenos resultados, sin lugar a dudas, pero lo importante es la ejecución del golpe en sí misma.

Esa fase previa de planificación del golpe es necesaria, pero en su justa medida. Si se trabaja bien, llegan los buenos resultados. Aunque hay golfistas que se pierden por el camino, en un mar de información que no aporta valor.

En el mundo de los negocios sucede lo mismo, a veces nos dejamos llevar por mares de datos que intentamos transformarlos en información que, a la hora de la verdad, no aporta ningún valor. Lo importante es la ejecución, tener claro lo que se va hacer y hacerlo. Sin miedo al fracaso, sin miedo a fallar, actuando de manera decidida y esperando la respuesta para actuar en base a ella.

jueves, 27 de junio de 2013

Hacienda debería perseguir el gran fraude y dejar las minucias

Hacienda lo ha vuelto a hacer: se ha colado en todos los titulares de los medios con otra actuación mediática. Esta vez, se trata del precintado del restaurante de Sergi Arola, por el impago de las cuotas de la Seguridad Social y Hacienda, que se une a los casos sucedidos en las últimas semanas. Unos casos que, a la postre, no son más que el chocolate del loro del fraude y el impago tributario en España. Ante este nuevo paso, surge la duda:¿Se atreverá la Agencia Tributaria a ir mucho más allá del chocolate del loro?

Fallos técnicos incomprensibles aparte, la Agencia Tributaria ha pisado el acelerador en las últimas semanas para ser actualidad por actuaciones sonadas. Sus actuaciones en bodas privadas, reclamando facturas de todos los gastos relacionados con el evento a los recién casados, la denuncia al jugador barcelonista Messi, al que acusa de dejar de pagar 4 millones al fisco de sus derechos de imagen… Y ahora el caso del restaurante de Sergi Arola.

Excepto en el caso de las bodas, que me parece algo excesivo, teniendo en cuenta los agujeros en la línea de flotación de Hacienda que se han permitido durante años, los otros dos son claros ejemplos de incumplimientos en cantidades, ciertamente, importantes. Eso es indudable. Pero también lo es el cambio de estrategia del departamento público para intentar la concienciación ciudadana a golpe de titular de los medios.

El supuesto fraude de Messi y el impago a la Seguridad Social y a Hacienda de Arola son, sin duda, mediáticos y, por tanto, resuenan una y otra vez. Pero, analizando las cantidades de las que hablamos, se trata del chocolate del loro. Queda mucha tela que cortar, muchos casos que destapar y sería un importante agravio, por comparación, el hecho de que no se persiguieran con el mismo ímpetu.

¿Dará Hacienda un golpe en la mesa de la liga de fútbol en los próximos meses para poner orden en unas cuentas que resultan, a todas luces, escandalosas en los tiempos que corren? ¿Se atajarán, de verdad, los casos de impagos o de fraude de grandes empresas, especialmente en el sector de la construcción?

Si la respuesta es ‘No’, entonces sólo habrá tratado de concienciar señalando con el dedo exclusivamente al chocolate del loro, mientras se seguirá mirando para otro lado en algunos de los casos más sangrantes y escandalosos que se dan en este país.

lunes, 24 de junio de 2013

Esos derechos que ni se han perdido ni han sido conquistados

¿Está la gente perdiendo esos derechos sociales que se adquirieron tras años de lucha? ¿Se está desmantelando el Estado del bienestar? Lo cierto es que no. Los problemas vienen de otro lado. Vamos a ver los datos.

Los euros que aparecen en los gráficos son siempre constantes en valor del año 2012, de tal manera que sea cual sea el año, el valor siempre es en euros del año 2012.

Primero vamos a ver cómo ha evolucionado el gasto social en los últimos 10 años. He dividido el gasto social en cinco apartados: pensiones, sanidad, educación, prestaciones por desempleo y otras ayudas sociales, entre ellas la dependencia.GASTO SOCIAL TOTAL









Como podemos ver hasta 2010 el gasto social en términos absolutos no ha dejado de crecer. Después de los recortes habidos desde 2010 el gasto social sigue estando por encima del de 2007 y casi un ¡¡30 %!! por encima del de 2003. En 2012 el gasto social fue de casi 268.000 millones de euros.

Pero en los últimos diez años la población de España ha aumentado mucho, por eso vamos a ver como ha evolucionado el gasto social por persona, siempre descontando la inflación, en euros constantes de 2012.

GASTO SOCIAL POR PERSONA
Los gastos sociales por persona llegaron a su máximo en 2010 con 6.104 €, en 2012 fueron de 5.666 €, un 17 % más que en 2003. El balance de los últimos diez años no parece indicar ningún desmantelamiento del Estado del bienestar, a pesar de la disminución de los últimos dos años.

Vamos ahora ver en detalle algunos gastos sociales.

PENSIONES
Nota: el gasto por pensionista es mayor que el gasto por pensión porque hay pensionistas que cobran más de una pensión.GASTO SANITARIO POR PERSONA


GASTO EDUCACION

Como se puede ver se repite el patrón de un fuerte aumento hasta el año 2009. A partir del 2010 el gasto sanitario por persona y el gasto en educación por alumno bajan, en 2012, a niveles de 2004.

El gasto sanitario por persona fue en 2012 un 4,4 % superior al de 2003.

El gasto en educación por alumno fue en 2012 un 5,4 % mayor en 2003.

El gasto en pensiones sufre un retroceso menor: lo que cobra de media al año cada pensionista vuelve en 2012 a niveles de 2008 y es un 14,6 % más que lo que recibían en 2003.

La conclusión es que el Estado del bienestar se ha recortado después de unos años de frenético crecimiento pero que incluso después de ese recorte sigue siendo sustancialmente mayor que el de hace diez años.

Pero ¿Por qué se producen los recortes? A ningún político le gusta recortar gastos sociales, ni a los del PSOE ni a los del PP ni a los de CC. Recortando gastos sociales no se ganan elecciones. No hay cosa que garantice más el poder, que es lo que persiguen todos los políticos, que decir “Hemos aumentado el gasto en sanidad”, “Hemos aumentado el gasto en educación”, “Hemos aumentado las pensiones”… Si esos aumentos de gasto han sido seguidos de mejoras en la sanidad o la educación o sólo son aumentos de sueldos o reducción de jornada a los funcionarios poco importa. Si se han tenido que subir los impuestos tampoco.

La causa más evidente de los recortes es el disparatado aumento del déficit público.

Con el inicio de la crisis la recaudación fiscal se desplomó y los gastos sociales, que sufrían su particular burbuja desde principios de siglo, generaron un explosivo déficit y su consecuente aumento de deuda.

DEUDA PUBLICA HABITANTE
La deuda pública por persona se ha duplicado en apenas cinco años, hasta los 18.700 euros por persona.
Existe el mito de que el rescate bancario está en el origen del déficit y de los recortes pero como se puede ver en el siguiente gráfico los rescates bancarios son sólo una pequeña parte del gasto social o del déficit.

GASTO PUBLICO
El rescate bancario sólo ha supuesto el 8 % del aumento del déficit público.
La mezcla de aumento del gasto social y de disminución de trabajadores provocó una explosión de gasto social por trabajador a partir de 2007. Los recortes en el gasto a partir de 2010 apenas han corregido el gasto social por trabajador debido a que la caída del número de trabajadores. En 2012 el gasto social por trabajador fue de 15.900 €, todavía por encima del de 2009.
gasto social trabajador

Y finalmente se llega a la raíz del problema: cada vez hay menos personas trabajando, en el 2007 de cada 100 personas 43 estaban trabajando, en 2012 sólo lo hacían 36.

PERSONAS TRABAJANDO POR 100

Y por otro lado en 2006 había 50 pensionistas o parados por cada 100 personas trabajando, en 2012 esta cifra había aumentado hasta ¡¡83!!

PENSIONISTA Y PARADOS  POR 100 TRABAJADORES
Si alguien piensa que con 16,5 millones de personas trabajando salimos de esta se equivoca, incluso con 18 millones de personas trabajando apenas volveríamos al ratio de 2010, 70 pensionistas o parados por cada 100 trabajadores.
“Esos derechos sociales que se adquirieron tras años de lucha” sólo podrán ser mantenidos si se acaba con el paro y se mejora la productividad, lo demás es retórica.

Salen 6.000 canarios a buscar trabajo fuera, pero entran 5.000 que lo encuentran aqui

Un total de 6.072 personas en Canarias han tenido que abandonar su lugar de residencia para encontrar trabajo en otra provincia durante los tres primeros meses del año. Esa es la noticia y de la que pocos hablan, por lo menos por aquí, que se pone el énfasis en los canarios que tienen que buscarse la vida fuera de las Islas. No se habla de un hecho contrario y que está curiosamente en el mismo estudio y es que en el primer trimestre de este año 5.817 trabajadores se han desplazado de otra comunidad autónoma o provincia y han logrado un contrato en las Islas, según datos de Randstad.

En el primer trimestre, Canarias se ha caracterizado por ser una región emisora de mano de obra, es decir, el saldo entre las personas que entran y salen en las islas en términos laborales resulta negativo y asciende a 255, esta es la realidad y no la pérdida de 6.000 personas de mano de obra, que se nos quiere vender. No relativizo nada en esto. Salir a buscarse los garbanzos fuera es una tragedia siempre y mi deseo es que las Islas ofrezcan a nuestra gente un sustento. Pero vivimos los tiempos que vivimos y la movilidad geográfica es un hecho.

Por provincias, Las Palmas es de las tres únicas en España que cuenta con saldo positivo de 131 personas entre los profesionales que emigran e inmigran por motivos laborales de su lugar de residencia.

En este caso, Las Palmas presenta un total de 3.342 contratos registrados como consecuencia de personas que han encontrado un trabajo en esta provincia y 3.211 que han abandonado su entorno y se han desplazado a otra comunidad o provincia a raíz de una oportunidad profesional.

En cambio, la provincia de Santa Cruz de Tenerife refleja 2.861 salidas profesionales a consecuencia de la movilidad durante el primer trimestre del año y 2.475 casos de trabajadores acogidos en las islas occidentales por motivos laborales procedentes de Las Palmas u de otras provincias españolas. De estas dos variables resulta un saldo negativo de 386 personas.

Respecto a la variación entre trimestres, en Santa Cruz de Tenerife se ha detectado una mayor caída entre las personas acogidas por motivos laborales (-20%), un decrecimiento que también se repite en las emigraciones profesionales de la zona (-14%). Las Palmas vive la misma situación pero con una caída más atenuada en la movilidad hacia fuera que en Santa Cruz de Tenerife, un -11%.

En cuanto a los casos de trabajadores que se ven obligados a alejarse de su entorno para optar por un puesto de trabajo fuera de su provincia, Las Palmas supera a Santa Cruz de Tenerife en la variación de un trimestre a otro y alcanza una disminución del -16%.

martes, 18 de junio de 2013

Una buena idea. El Banco de España y la CNMV entran en los centros educativos

El Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) han promovido un interesante plan de educación financiera que supone el desembarco de estas instituciones en los IES españoles. En Canarias ya era hora que llagaran. El plan está dirigido a jóvenes de 14 años que están cursando el tercer curso de la ESO y su objetivo es introducirles en cuestiones elementales de la economía. Hasta la fecha es sólo un proyecto al que se han acogido más de 400 centros españoles.

Los docentes encargados de impartir este plan podrán utilizar los recursos y orientaciones académicas de la web “Finanzas para todos”. En la misma encontramos secciones sobre cómo llegar a fin de mes, las etapas de la vida de la economía, consejos para invertir, productos y servicios financieros o un kit financiero de supervivencia, además de material didáctico relacionado con cheques, tarjetas de débito, servicios bancarios, libretas de ahorro o cuentas corrientes.

En definitiva, una buena iniciativa del Banco de España y de la CNMV encaminada a que nuestros jóvenes comprendan los conceptos económicos y financieros más elementales de la economía. No en vano, la ausencia de una asignatura relacionada con la economía en la ESO (problema que posiblemente se solvente con la entrada en vigor de la LOMCE) supone que los estudiantes acaben su etapa de secundaria sin absolutamente ningún conocimiento teórico sobre la disciplina económica, lo cual podemos considerar una aberración al sentido común si tenemos en cuenta que todos ellos tomarán importantes decisiones económicas a lo largo de su vida.

martes, 4 de junio de 2013

Tres tipos de ascensos que acaban con un buen trabajador

En ocasiones se utilizan los ascensos como una herramienta de reconocimiento laboral, pero esto puede ser una decisión equivocada si no existe una buena planificación y si no se analizan los perfiles de los empleados. Un ascenso puede acabar con un buen empleado, pero además puede acabar con un buen equipo.

Estudiándolo en términos generales, existen algunas circunstancias concretas que pueden hacer que un ascenso sea un fracaso para la empresa y para el empleado. El primer paso es ser conscientes de que no todos los empleados están preparados para adquirir responsabilidades directivas y que algunos ni siquiera lo desean.

Ascendido por antigüedad/rendimiento
La experiencia es un grado, pero durante la vida laboral de un empleado en la empresa puede que no se adquieran los conocimientos necesarios para gestionar un equipo o adquirir responsabilidades diferentes. Un buen vendedor puede ser un mal jefe de ventas y las razones no son complicadas de entender si estudiamos la diferencia entre ambos puestos.

Un trabajador que lleva muchos años puede haber adquirido una rutina y una forma de trabajar que le genera una gran seguridad en su desempeño. Un ascenso puede acabar con esto y hacer que el empleado esté totalmente desubicado, sobretodo cuando no existe voluntad de adquirir nuevas responsabilidades y/o no se tiene la capacidad de ejecutarlas.

El empleado podría verse obligado a ascender ascender para no decirle "no" a la empresa, por lo que no debemos confiar todas las cartas a la simple aceptación del puesto por parte del trabajador.

En profesiones especialmente individualistas o competitivas, los empleados puede que no hayan obtenido una buena cultura de equipo y una visión global del negocio, por lo que si no se realiza una buena formación en plazos adecuados, el nuevo jefe se podría encontrar perdido, bajando la productividad general y perdiendo su autoestima.

En definitiva, la antigüedad y el rendimiento pueden buenos factor para establecer un ascenso, pero hay otros condicionantes a analizar tan importantes o más, y ciertas carencias a cubrir. Es primordial analizar las competencias del aspirante y si es posible, generar un plan de carrera para que el ascenso esté planificado.

Ascendido por urgencias
La baja repentina de un jefe puede obligarnos a cubrir su puesto de forma temporal o definitiva en tiempo récord. Lo adecuado sería estar formando a varias personas para que tengan ciertas capacidades básicas para optar al puesto, de forma que la transición entre puestos sea más sencilla.

Además, la formación continua le da valor al trabajador y hace que la empresa sea pueda adaptar mejor a los cambios. Si no actuamos correctamente, podremos terminar con un jefe circunstancial que haga un mal trabajo, o al menos uno mucho peor que si tuviera unas nociones mínimas.

Este mal trabajo le resta valor como profesional tanto dentro como fuera de la empresa (sobretodo en sectores muy cerrados), haciendo que cargue con unos errores cometidos por no estar preparado para asumir la función que le fue encomendada. Así, si asumió el puesto de liderazgo de forma temporal, puede ser juzgado por ello y considerado como no apto para futuros ascensos, aunque su nivel de preparación haya mejorado desde entonces.

Ascendido por enchufe
El enchufismo en la dirección no solo se produce para hacer un favor a un conocido o familiar (pocas empresas pueden actuar como una ONG), sino para ubicar en puestos de poder a personas de confianza, primando este factor sobre su preparación.

Esto puede desmotivar a los empleados que han estado optando por el puesto, haciéndoles pensar que el techo al que pueden aspirar está justo debajo del enchufado y que el nuevo jefe no es de confianza, ya que tiene lazos personales con la dirección general que le permitirá evitar que nadie sobresalga por encima suyo.

Aún así, los efectos negativos no solo los notan los demás, sino también el propio ascendido. Lo más probable es que no consiga la confianza de su equipo, que lo vean como un “topo”, que la comunicación formal sea escasa y que tenga muchos problemas para mantener la motivación.

A esto hay que sumarle que será señalado como el enchufado, lo cual le restaría autoridad moral y respeto profesional, aunque pudiera tener un buen nivel formativo. Por tanto, el enchufismo puede ser muy malo para un empleado y para una empresa. El ascenso debería responder a factores objetivos, ya que la confianza no es exclusiva de amigos y familiares, sino de profesionales comprometidos y responsables.

Ojo con los perfiles en las redes sociales y la búsqueda de empleo

Hace un tiempo en una reunión de amigos, uno contó que las consultoras investigaban a los candidatos a un puesto de trabajo a través de Internet. Todos pusieron el grito en el cielo: “¿Y la privacidad?”. No parecía lógico que un tercero valorara tu curriculum para desempeñar un trabajo basándose en lo que encontrara en Facebook. A mí me pareció razonable el enfado, pero también que la otra parte empleara sus métodos para conocer mejor al candidato siempre y cuando éste se expusiera libremente en Internet.

Lo cierto es que hay que prestar atención a los perfiles que abrimos en las redes sociales, sobre todo durante la búsqueda de empleo. No, no lo digo con el ánimo de coartar la libertad de expresión, pero ante todo si estamos presentes en alguna red social, deberíamos cerrar con siete llaves el acceso a personas que no son de nuestro entorno.

Un estudio ha demostrado que uno de cada diez jóvenes ha sido rechazado para un trabajo debido a su perfil en las redes sociales. El estudio realizado por Young People’s Consumer Confidence (YPCC) ha analizado a 6.000 jóvenes de entre 16 y 34 años en seis países diferentes para evaluar qué impacto tienen los medios de comunicación social en sus carreras como profesionales.

El estudio revela que los jóvenes son más propensos a crear y modificar su perfil para quedar bien y gustar a sus amigos en lugar de hacerlo en base a los posibles empresarios que contratan. Además, muchos jóvenes siguen teniendo confianza en sí mismos y en mejorar en el ámbito laboral más que sus padres. En China y Nigeria es donde se dan niveles de confianza más elevados, seguidos de cerca por Brasil e India.

De los datos de estudio que mezcla dos conceptos: la mejora del perfil orientado a la búsqueda de empleo, y el beneficio de estar presente en ellas me quedo en el término medio. Veamos, las redes sociales no dejan de ser un mero escaparate, nada más. Algunas redes profesionales como Linkedin te dan información de puestos de trabajo a los que sin una buena formación y una imagen digital coherente, no tendrás acceso .
Confundir el estar presente en las redes sociales con conseguir el éxito profesional es un error

También lo es el subir fotografías realizadas en momentos de ocio que nos muestren comojuerguistas profesionales. Sé que parece un tanto absurdo puesto que una persona en su vida personal, cuando no está trabajando puede hacer lo que le plazca aunque un mero apunte: ¿controlamos también lo que decimos sobre algún jefe o compañero? ¿Es necesario gritarlo en Internet? y sobre todo ¿para qué nos sirve?

A los que hemos vivido sin Internet en nuestra adolescencia nos resulta llamativo la facilidad con la que muchos jóvenes y también mayores comparten sus momentos en estado ebrio, fotografías íntimas que jamás las enseñarían a un grupo de personas de su entorno, pero que no dudan en distribuir alegremente con una suerte de extraños que son amigos de sus amigos.

Al final, las nuevas tecnologías son algo más que manejar bien Facebook o Twitter, éstas son un mero vehículo para el ocio para un tanto por ciento muy elevado de las personas. Las redes sociales ya son los nuevos bares o pubs desde hace años, un concepto que hemos tratado aquí y que describe a la perfección ese espacio: cómo nos reunimos, pero también cómo nos comportamos, y en muchas ocasiones el sentido común y la sensación de que todo vale, nos impide ver que una fotografía o un comentario fuera de tono es igual de perjudicial dicho en una reunión en la calle, que en tu muro de Facebook.

No se debe confundir el derecho a hacer lo que se quiera en el tiempo libre, con dejar un cartel con letras mayúsculas en mitad de una carretera donde ponga tu número de teléfono y tus ideas respecto a temas que pueden herir, ofender o simplemente ofrecer una imagen de ti poco seria y que no genera confianza y ya no solo me refiero a vistas de conseguir un empleo sino en general.

Mucho se habla de despidos a raíz del uso de las redes sociales en el ámbito laboral, pero en estos años previos a la búsqueda de un trabajo (aunque sea un momento complicado) una gran cantidad de personas de perfil muy joven, están dejando un rastro poco apetecible para un responsable de recursos humanos que decida saber un poco más de ti. En mi opinión se ha perdido el encanto de pasárselo bien y ser capaz de que no lo sepan hasta en Japón. La libertad es otra cosa.

lunes, 3 de junio de 2013

Profesiones inmunes a la crisis

Hay crisis gigantesca, enorme, sin precedentes. Crisis mundial que afecta sobre todo a la Unión Europea pero que a Canarias ha reducido a cenizas un mercado de trabajo que daba leves pero seguidas alegrías desde hacía diez años. Eso todo cambió en agosto de 2007. Los últimos datos de la Encuesta de Población Activa del Instituto Nacional de Estadística muestran que el paro actúa por barrios. Estos barrios no son geográficos, sino que están determinados por otros factores como el tamaño de la empresa o la profesión.
Así la crisis será global, pero a unos afecta mucho y a otros nada o hasta se permiten el lujo de crecer en su actividad.

Las cinco profesiones con mayor tasa de actividad son: veterinaria (92,05%), informática (90,78%), protección del medio ambiente (87,86%), periodismo e información (83,76% y servicios personales (83%). Además veterinaria tiene la característica de que la tasa de ocupación es más alta en mujeres (93,67%) que en hombres (90,9%).

En cambio la lista varía ligeramente en lo que se refiere a las mayores tasas de empleo. Veterinaria sigue estando en primer lugar con un 90,24% (87,18% para hombres y 92,78% para mujeres). Seguida por matemáticas y estadística (75,25%), Derecho (73,76%), Ciencias de la Vida, (73,35%), e Informática (73,02%).

En cambio las formaciones que tienen menores tasas de empleo son programas de formación básica (35,19%), servicios de seguridad (51,41%), servicios de transporte (53,69%) y arquitectura y construcción (57,61%).

El tamaño de la empresa y el tipo de trabajo que se desempeña también es un factor importante. Los ocupados en establecimientos de menos de diez trabajadores llevan bajando ininterrumpidamente desde 2008 y sólo en 2012 bajaron en 300.000 personas.

En cambio los trabajadores de las empresas grandes (más de 250 empleados) aumentaron durante 2012, 20.000 trabajadores. Una cantidad insuficiente para cubrir las pérdidas en las pequeñas empresas, como muestra el incremento del desempleo que experimentó la economía en ese tiempo. Es evidente que esta estadística coloca a las Islas en un lugar nada bueno en cuanto al empleo. Es que el 95% de nuestras empresas son pequeñas o muy pequeñas.

Además si lo único que existen son jefes, pero ningún subordinado, nos encontramos como la mayor parte de los canarios (autónomos). 7 de cada 10 canarios con trabajo se encontraban en esa situación. El resto son independientes (10,6% de la población), directores de una empresa pequeña o departamento pequeño (7,1% de la población), encargados (6,5%), mandos intermedios (5,9%) y directores de empresa grande o media sólo son el 0,8%. Algo normal considerando que en todos lados hay más marineros que patrones.

Conocer el nivel de paro de nuestra profesión nos puede ayudar fuertemente a conocer nuestra capacidad de negociación salarial. Cuanto más difícil sea sustituir como empleado más dispuestos estarán a negociar. Pero esta información es igualmente útil para los empresarios, pequeños sobre todo, que pueden tomar las decisiones de contratación sabiendo cómo es su sector.

Aunque cualquier estudiante que por estas fechas estén en selectividad y se esté planteando elegir la carrera, tiene que tener en cuenta que aunque las profesiones tengan mejor o peores condiciones, no necesariamente significa que el mercado laboral sea el mejor. Por ejemplo, hace unos años en las listas de las profesiones con menos desempleo estaba la construcción, todo lo contrario que en la situación actual. En ese sentido, es mejor encontrar algo en lo que podamos ser muy buenos y en todo caso tener un poquito de suerte!!.

martes, 28 de mayo de 2013

Una basura de ley de emprendedores

No es porque nuestros gobernantes sean unos zotes. Que lo son, pero incluso ellos podrían haber hecho algo mejor si se lo hubieran propuesto. No, el verdadero motivo es que España no es país para pringados, por lo menos así nos sentimos y la ley de Emprendedores es una basura

Es posible que alguno se haya engañado con los cantos de sirena y hasta se haya creído que va a ser más fácil emprender en España. Así que mejor voy a repasar las principales medidas de la ley:

No se pagará el IVA de las facturas no cobradas, según y cuándo
Ojo porque probablemente el IGIC coja idéntico camino, así que miro con lupa la letra pequeña de esta ley para saber por donde van a ir los tiros. Llevan hablando de esto desde que llegaron al gobierno. Ahora lo aprueban, pero solo a partir del 2014. Pero lo grave es que si lees la letra pequeña, resulta que en diciembre de todas maneras tienes que pagar el IVA de las facturas pendientes, así que todo el esfuerzo adicional que tienes que hacer para adaptar tu contabilidad prácticamente es a cambio de nada. No es que puedas pagar el IVA cuando cobras, es que Hacienda te deja unos meses para ver si cobras, pero a final de año quiere su parte, hayas cobrado tú o no hayas cobrado.

50€ de cuota de autónomos, pero un ratito
El descuento está limitado a un tiempo, no a unos ingresos. Si, como suele ser frecuente cuando empiezas sin un duro, no has alcanzado en seis meses un nivel de ingresos decente, es tu problema. Y recuerden que ahora para muchos el emprendimiento es la salida al paro, así que eso de emprender armado solo con tus habilidades y mucha voluntad es muy frecuente.

Me pueden llamar  pesado por volver a sacar el tema, pero en Inglaterra se llama el sistema se llama PAYE (Pay As You Earn, Paga Según Ganas) y consiste precisamente en eso, empiezas pagando 20 libras al mes y vas subiendo en función de tu facturación, no en función del tiempo que haya pasado.
¿Te sonaba bien lo de los 50€ a pesar de todo? Vale, pues si eres hombre y mayor de 30 pero menor de 35, te conviene pensar en un cambio de sexo. Sí, es que hay discriminación por sexo y por edad. No por otras circunstancias, como formación, o capacidad financiera. No. Si tienes la edad equivocada o el sexo equivocado, pringas.

Cotizaciones de autónomos en pluriactividad
Bajo estas palabras que suenan hasta mal se esconde una, a mi juicio, estafa en toda regla. ¿O cómo llamarías a cobrar algo a cambio de nada? Es lo que sucede ahora si se te ocurre emprender una actividad paralela mientras trabajas por un sueldo. Ya pagas Seguridad Social en tu sueldo, pero tienes que volver a pagar como autónomo sin recibir ningún beneficio a cambio. Más aún, si te despiden de tu trabajo, pierdes el derecho a cobrar el paro. Eso por listo, por querer dedicar tu tiempo libre a ganar dinero y no a ver la tele como es tu obligación. No vamos a hacer como en Alemania, donde la cuota de autónomos en este caso es 0.

Ahora resulta que aplicarán un descuento a lo que sigue siendo una estafa, pero como esto no les parece suficiente hay unas reglas para poder aplicar este descuento que son imposibles de entender para el común de los mortales.

Responsabilidad limitada, pero no tanto
Las deudas con Hacienda o Seguridad Social no son salvables y el SMI puede ser embargado, no así en los empleados por cuenta ajena.

Pues eso, que cuando se analiza medida por medida uno se da cuenta de que están hechas para conseguir titulares en la prensa, pero en absoluto para ayudar a una persona que sin más recursos que su capacidad de trabajo intenta salir adelante por su cuenta.

Para comparar, esto es lo que supone emprender en Inglaterra, sin ley de emprendedores ni zarandajas:
Si constituyes una sociedad limitada con estatutos estándar, puedes hacerlo online pagando una tasa de 15 libras. No hay capital social mínimo, puedes constituirla con una acción de una libra.
No hay que cobrar ni declarar IVA hasta que no factures 77.000 libras al año. Seas mujer, joven, anciano marinero o maduro bosquimano.
Si te das de alta en el IVA pero no superas ciertos límites de facturación anual, puede aplicar el criterio de caja (sin límite de diciembre), o puedes aplicar una tarifa plana de un 10-15% de tu facturación (que pagas anualmente), o puedes hacer adelantos mensuales o trimestrales en función de lo que preveas que vas a facturar y hacer una sola declaración anual en lugar de cuatro trimestrales.
No hay que hacer declaraciones trimestrales de IRPF.
La cuota de autónomos empieza en 20 libras, y es proporcional a tu facturación.
El impuesto de sociedades se calcula al final del ejercicio natural y se paga 6 meses más tarde.
Hay una exención del 10% respecto al impuesto que pagas personalmente (el equivalente al IRPF) para los dividendos que hayas obtenido de tu empresa.
¿Por qué es así la ley?

Sencillamente, porque vivimos en una sociedad cuyas reglas de juego protegen a las grandes empresas.

La hiperregulación que tenemos, con más de un millón de páginas de leyes y reglamentos que afectan a cada minuto de la vida de una empresa, lo que hacen es generar una situación de indefensión para las pequeñas empresas que no pueden permitirse tener abogados en plantilla. Además, a esa hiperregulación se suma una dejadez generalizada para perseguir a los infractores.

Un ejemplo, la obligatoriedad de darse de alta en autónomos cuando tu actividad es habitual. Otra, la Ley de Protección de Datos, que establece condiciones draconianas y multas fortísimas, pero que infinidad de empresas (PYMES y no tan PYMES) se saltan a la torera todos los días, entre otras cosas porque el coste de cumplirla es altísimo.

Así te acostumbras a vivir en una “zona gris”, en la que habitualmente no te pasa nada, pero te puede caer una buena como alguien se fije en tí. Te lanzas a hacer cosas “en negro”, o incumpliendo alguna ley. Porque como hay tantas, y algunas son contradictorias, lo que es seguro es que algo mal vas a hacer. Los más pusilánimes abandonan, y los más osados se arriesgan al castigo en el momento más inesperado.

¿Alguien cree que esas normas son inocentes y no tienen nada que ver con esto? ¿Alguien cree que es puro azar que las grandes empresas tengan infinidad de rendijas por donde escabullirse del impuesto de socidedades y acaben pagando menos que las pequeñas? Del mismo modo que los sindicatos no representan a la inmensa mayoría de los trabajadores, sino solo a los que tienen un puesto fijo (especialmente en el sector público), las organizaciones empresariales no trabajan para favorecer a la PYME, sino para mantener el statu quo de los grandes, los que ya han llegado.

Nuestra falta de competitividad no es porque aquí falte gente con ganas de buscarse la vida y ganar dinero. Es porque todo está organizado para que te sea muy difícil emprender, y si a pesar de todo lo intentas y consigues salir adelante, para que te quedes enano, por debajo de los 50 empleados.

Ahora puedes pensar que esto es así porque nuestros legisladores, al menos desde la democracia, son por regla general abogados que no han montado una empresa en su vida. O puedes pensar que los capos de las grandes empresas se reúnen en sus clubes para decidir qué leyes van a obligar a aprobar a los gobiernos. O que miles de pequeños actos de influencia con los políticos (súbeme este impuesto por aquí, dificúltame esta posibilidad de competencia por allá) han acabado creando el infierno regulador actual. O que la seguridad jurídica, el bienestar de los trabajadores y la protección de los consumidores exigen estos pequeños sacrificios.

Sea como sea, lo cierto es que emprender en España, hoy y con estas leyes, es como jugar a la ruleta rusa con un revólver cargado con 5 balas. La ley de emprendedores es una basura porque no puede ser otra cosa. Tienen que hacerla porque les da titulares positivos, y porque algún pardillo picará y empezará a pagar impuestos por el “privilegio” de intentar buscarse la vida y crear riqueza. Pero para favorecer el emprendimiento habría que derogar y reformar centenares de normas, habría que reducir la influencia de muchas personas, habría que eliminar muchas barreras que les vienen muy bien a los que ya están establecidos, habría que eliminar infinidad de puntos en los que un funcionario puede ejercer su poder discrecionalmente, habría que allanar el campo de juego y simplificar las reglas para que entraran nuevos jugadores con igualdad de oportunidades.

Y esto sí que no va a pasar.

jueves, 23 de mayo de 2013

Los verdaderos derechos adquiridos y su coste

Uno de los mantras que repite la progresía keynesiana es que durante esta crisis se están perdiendo “derechos que se adquierieron tras años de lucha”. Los culpables de esta supuesta pérdida de derechos son los sospechosos habituales: el neoliberalismo, el capitalismo salvaje, los mercados desregulados, la globalización, las políticas de austeridad y la Merkel.

¿De qué derechos hablamos? Pues de los derechos que se asocian al Estado del bienestar: la educación y la sanidad “gratuitas”, las pensiones públicas y últimamente en la dependencia, también a ciertas condiciones laborales y otras ayudas sociales.

¿Cómo se conquistaron esos derechos? La izquierda siempre alude al mito de la lucha obrera. En el imaginario de la izquierda la riqueza es una constante, la riqueza de unos viene de la pobreza de otros, de quitársela a los pobres o empobrecidos, y las mejoras de cualquier tipo en el nivel de vida de la gente han venido de la lucha obrera que ha conquistado derechos arrebatándoselos a los ricos. Bueno, está también la versión de los políticos según la cual los derechos los han conseguido ellos haciendo pagar a los ricos.

Por supuesto toda la anterior historia tiene un pequeño fallo. ¿Cómo es posible que los ricos de hoy sean más ricos que nunca con la cantidad de derechos que tiene ahora la gente? En realidad la historia de la lucha obrera no es más que una justificación a posteriori de la mejora de calidad de vida de la gente.

La mejora de la calidad de vida de la gente no se produjo por ninguna lucha obrera ni ninguna conquista social. La mejora de la calidad de vida se produjo por el aumento de la productividad. Si la gente siguiese produciendo lo mismo que hace cien años las condiciones de vida de la gente seguirían siendo las mismas. Ésto, que es obvio, es algo que parece inaceptable para mucha gente.

¿Por qué ha aumentado la productividad, especialmente durante los últimos 200 años? Fundamentalmente gracias a un ambiente cultural y político favorable a la libertad. La libertad permitió que la gente buscase la prosperidad económica. La libertad permitió que la gente buscase nuevos métodos de producción, permitió a la gente ahorrar y acumular capital, permitió que la gente inventase nuevos bienes para satisfacer sus necesidades y eso generó una explosión de riqueza.

Alguien podría pensar que la generación de riqueza no tendría que suponer una mejora de las condiciones de vida de toda la gente, sino que esa riqueza se concentraría casi exclusivamente en una minoría. Sin embargo, la libertad es para todo el mundo, no para una minoría y esa libertad trajo competencia. Competencia a la hora de vender bienes y a la hora de contratar trabajadores.

La mayor productividad y la competencia permitió que todo el mundo disfrutase de un mejor nivel de vida. A medida que la gente tiene mayores bienes a su disposición satisface las necesidades que cree más importantes. Las auténticas conquistas sociales, los derechos sociales, se han conseguido gracias a la gente que mejoró la productividad y que encontró nuevos bienes para satisfacer las necesidades de la gente.

Sin la intervención del Estado la gente también hubiera gastado más dinero en sanidad o en educación. De hecho eso es lo que pasó antes de la intervención del Estado. Y de hecho, eso pasa ahora cuando la gente contrata un seguro médico privado, va al dentista, paga clases particulares para sus hijos o se paga un máster.

Sin el aumento de la productividad y de la producción hubiera sido imposible todo el Estado del Bienestar. Porque los médicos y las enfermeras cobran y los profesores y los catedráticos cobran. Se han magnificado los recortes cuando el número de funcionarios sigue siendo el mismo que a principios de la crisis y el gasto público, incluso si excluimos los intereses, apenas ha disminuido.

Pero más allá de todo eso los “derechos sociales adquiridos tras años de lucha” no están en peligro por ningún ataque ideológico. Están en peligro por los propios gobernantes que los crearon. 

No hay “derecho social” si no hay presupuesto.

No hay “derecho social” si no hay alguien que pague impuestos para que se mantenga.

La culpa de que los “derechos sociales” estén en peligro viene por un lado de la elevada tasa de paro y por otro, de que se hicieron promesas imposibles de cumplir. Para que funcione un sistema de pensiones como el que se prometió a la gente sería necesaria una natalidad de 3 hijos por mujer y la española hace tres décadas que está por la mitad. Y claro, que la gente tuviese trabajo.

Hay ilusos que piensan que el problema se solucionaría subiendo los impuestos o acabando con la economía sumergida. Piensan que la mayor recaudación fiscal no tendría consecuencias sobre el consumo, la inversión, el empleo, la producción. Evidentemente eso no es así: aumentar la recaudación fiscal no es aumentar la producción, aumentar la presión fiscal sobre los más ricos no impedirá que haya consecuencias también para los menos ricos.

Jamás saldremos de esta crisis si la gente no acepta que el Estado no es todopoderoso y que los “derechos sociales adquiridos tras años de lucha” son fruto del trabajo y no de ninguna protesta o redistribución.

lunes, 20 de mayo de 2013

No se puede vivir sin internet

El 17 de mayo se celebró el Día mundial de Internet y seguramente muchos de nosotros pensamos en cómo ha cambiado el mundo de la empresa la llegada de esta herramienta, pero también me surge la pregunta ¿puede la empresa vivir sin Internet? Y aquí no me refiero a que los empleados tengan o no acceso a Internet.

También se trata del uso de Internet para realizar las actualizaciones de nuestros equipos, de las aplicaciones, de los antivirus o simplemente para comunicarnos, compartir archivos, realizar videoconferencias. En muchos de estos supuestos podemos capear el temporal, pero está claro que Internet hoy en día es básico para la empresa.

Porque puede que todo esto lo podamos hacer offline, es decir, descargar actualizaciones, nuevos programas, en casa para luego instalarlos en la empresa, por ejemplo. Pero igualmente estamos haciendo un uso de Internet, aunque no tengamos contratada una línea en el trabajo.

Lo mismo con los archivos, podemos intercambiarlos a través de memorias USB, pero también podemos arrastrar problemas de virus intercambiando de esta manera, porque también será complicado mantener aislados y a salvo los equipos de la empresa.

El caso es que hoy, prescindir de Internet en la empresa es más un problema que una solución, es simplemente impensable en mi opinión profesional. En algún momento se va a necesitar consultar un mapa, solicitar información sobre otra empresa. Se podrá acudir a métodos tradicionales, pero seguramente se tardará mucho más en resolver ciertas cuestiones.

Todo esto para empresas que tienen o realizan algún trabajo con un ordenador o smartphone. Un fontanero, por ejemplo, que tiene contratada a una empresa para que le gestione todo el tema de impuestos o no tiene página web queda al margen de todo este tema. Pero lo afirmo, por poco tiempo, porque estar al margen de la red puede quedar bien en muchas discusiones pero será algo como estar fuera de la electricidad o de las carreteras o las aceras.

En Canarias por doble motivo. la informática es la única herramienta que permite a las empresas competir en el primer mundo. Desarrollar esta actividad puede colocar a Canarias enganchada en las empresas de primer niver o justo lo contrario, no hacerlo nos catapulta al subdesarrollo a estar más aislados.